Londres, 19 ene (EFE).- El precio del barril de petróleo Brent para entrega en marzo terminó este miércoles en el mercado de futuros de Londres en 88,35 dólares, un 0,90 % más que al finalizar la sesión anterior.

El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un incremento de 0,79 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 87,56 dólares.

La cotización mantuvo la tendencia al alza de los últimos días, camino de la barrera psicológica de los 90 dólares por barril, impulsada por los temores sobre una oferta global demasiado reducida ante la evolución de la demanda.

A las tensiones geopolíticas en Oriente Medio y en Ucrania, que han espoleado las negociaciones en el mercado del petróleo en los últimos días, se sumó este miércoles como factor en el alza del precio la interrupción temporal del suministro en el oleoducto entre Irak y Turquía.

"Detrás de ese aumento vertiginoso del precio del petróleo hay varios factores", declaró a Efe Frédéric Mertens, profesor y coordinador del Grado de Relaciones Internacionales de la Universidad Europea de Valencia.

"El primer factor es que ha habido y hay interrupciones de producción de petróleo en varios países que tienen tensiones políticas o de conflicto armado como por ejemplo, Libia. Las interrupciones de producción provocan cortes en los flujos de abastecimiento de petróleo a los países industrializados", afirmó Mertens.

"El segundo factor son las tensiones geopolíticas, por ejemplo, el caso de los Emiratos (Árabes Unidos), que han sido atacados por los yemeníes", agregó académico.

Para el profesor de la Universidad Europea de Valencia, destaca asimismo que la variante ómicron del coronavirus, "a diferencia de otras", no ha "paralizado la economía" a nivel mundial, por lo que "la demanda energética, basada fundamentalmente en el petróleo, ha aumentado".

Martens advierte de que algunas previsiones sugieren que el barril de crudo podría llegar a alcanzar entre 96 y 105 dólares. "Esto hay que ponerlo en el contexto de la dependencia de los países industrializados hacia los países productores de petróleo y de que la OPEP tienen dificultades para aumentar la producción", apunta. EFE

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