El Giro de Italia 2024 sigue siendo un espectáculo y este lunes llega la segunda jornada de descanso tras otra genial exhibición del esloveno Tadej Pogacar en Livigno. La etapa reina de esta 'Corsa Rosa' no defraudó, presentando un desafío de 222 kilómetros, 5.400 metros de desnivel y cinco puertos exigentes, incluyendo el famoso Mortirolo. A pesar de las dificultades, Pogacar demostró una vez más por qué es considerado uno de los mejores ciclistas de la historia.

Pogacar llevaba todo el Giro esperando esta etapa reina. El trazado endemoniado prometía ser un escenario perfecto para una de sus exhibiciones ataviado de rosa. Desde el inicio, la etapa mostró su dureza con una fuga formada por grandes nombres del ciclismo. Entre los escapados estaban Storer, Juanpe López, Pelayo Sánchez, Alaphilippe, Nairo Quintana, Narváez y Attila Valter, entre otros. Este grupo cabecero, que superaba las 50 unidades, se fue fragmentando a medida que avanzaban los kilómetros y los puertos se sucedían.

Por detrás, el equipo UAE de Pogacar intentó endurecer la carrera antes de llegar a las rampas del Mortirolo. Sin embargo, el paso por este famoso puerto no dejó grandes sorpresas. A pesar de un aparente endurecimiento, los fugados comenzaron a soñar con la victoria de etapa, siempre y cuando no hubiera movimientos significativos en el pelotón de los favoritos.

Supervivencia y estrategia

El final de la etapa se perfilaba como una lucha de supervivencia con los pasos por el Passo di Foscagno y el Mottolino. A falta de 25 kilómetros para el final, la fuga empezó a desintegrarse. Attila Valter, Cerni, Steinhauser y Piganzoli tomaron la delantera, mientras que Juanpe López y Storer cedían terreno. Nairo Quintana, con su vasta experiencia, se mantuvo en la lucha, avanzando en busca del triunfo de etapa.

El ataque de Pogacar

Con 15 kilómetros por delante, Pogacar hizo su movimiento. Con sólo Majka como compañero, el esloveno activó su 'moto' y se lanzó en solitario. Quintana, quien había hecho todo lo posible para mantener su ventaja, vio cómo Pogacar se acercaba rápidamente. A falta de 2 kilómetros, el esloveno sobrepasó a Quintana y se encaminó hacia la victoria.

Los últimos kilómetros fueron una demostración de la grandeza de Pogacar. Cada pedalada, cada movimiento fue una muestra de su talento y determinación. Con esta victoria, Pogacar no solo ganó una etapa del Giro, sino que también escribió uno de los episodios más gloriosos de su carrera, cimentando aún más su lugar en la historia del ciclismo.

La etapa reina del Giro de Italia 2024 fue un espectáculo de resistencia, estrategia y puro talento. Tadej Pogacar demostró una vez más por qué es uno de los mejores ciclistas del mundo, apoderándose de la victoria en Livigno y apagando los sueños de Nairo Quintana. Con esta actuación, Pogacar no solo se acerca a la victoria general del Giro, sino que también continúa construyendo su leyenda en el ciclismo mundial.