El ciclista esloveno Tadej Pogacar, del equipo UAE Team Emirates, ha dejado una marca indeleble en la etapa 14 del Tour de Francia 2024, al imponerse con contundencia en una jornada de alta montaña que se extendió a lo largo de 151,9 kilómetros, entre las localidades de Pau y Saint-Lary-Soulan Pla d'Adet. Esta victoria no solo marca el segundo triunfo de Pogacar en la presente edición del Tour, sino que también refuerza su liderato en la clasificación general, aumentando su ventaja sobre el danés Jonas Vingegaard, del equipo Team Visma-Lease a Bike.

La etapa de hoy fue una de las más esperadas de la competición, conocida por su exigente desnivel de 3.999 metros y su emblemático ascenso al Puerto del Tourmalet, un paso de montaña de categoría especial que ha sido testigo de muchos momentos históricos en el ciclismo. Con una longitud de 19 kilómetros y una pendiente media del 7,4%, el Tourmalet representaba un desafío monumental para los ciclistas. A pesar de su colocación estratégica, a 80,9 kilómetros de la meta, el puerto fue el escenario principal donde los equipos más fuertes intentaron hacer sus movimientos decisivos.

El día comenzó con el habitual nerviosismo y varios intentos de fuga desde el inicio. El belga Amaury Capiot, del equipo Arkéa-B&B Hotels, fue uno de los primeros en abandonar la competición, visiblemente emocionado al descender de su bicicleta. Esta retirada temprana presagiaba la dureza de la etapa. Poco después, el neerlandés Frank van den Broek, del dsm-firmenich PostNL, y el alemán Simon Geschke, del Cofidis, protagonizaron el primer intento serio de escapada. Sin embargo, su ventaja fue rápidamente neutralizada por un pelotón decidido a no permitir demasiadas licencias.

A medida que la carrera avanzaba, varios ciclistas intentaron ataques sin éxito. Entre ellos, el español Enric Mas, del Movistar Team, y el británico Simon Yates, del Jayco AlUla, hicieron un esfuerzo significativo por romper la monotonía del pelotón. A pesar de sus intentos, no lograron consolidar una ventaja sustancial. El noruego Jonas Abrahamsen, del Uno-X Mobility, también intentó destacarse, pero al igual que los demás, fue absorbido por el pelotón.

La primera escapada importante del día se formó después de 60 kilómetros de carrera, cuando un grupo de 15 ciclistas logró una ventaja de medio minuto sobre el pelotón. Entre los escapados se encontraban nombres notables como Chris Juul-Jensen (Jayco AlUla), Michal Kwiatkowski (INEOS Grenadiers), Bruno Armirail (Decathlon-Ag2r La Mondiale), Marco Haller (Red Bull-Bora-Hansgrohe), David Gaudu (Groupama-FDJ), Jasper Philipsen (Alpecin-Deceuninck), Rui Costa, Ben Healy, Sean Quinn (EF Education-EasyPost), Victor Campenaerts (Lotto-dstny), Simon Geschke (Cofidis), Louis Meintjes, Biniam Girmay (Intermarché-Wanty), Alexey Lutsenko (Astana Qazaqstan) y Fabian Grellier (TotalEnergies).

Este grupo de escapados vio cómo su ventaja crecía a más de cuatro minutos sobre el pelotón al acercarse al Tourmalet. A medida que se aproximaban a este icónico puerto, otros ciclistas, incluidos los españoles Oier Lazkano (Movistar Team) y Raúl García Pierna (Arkéa-B&B Hotels), lograron unirse a la fuga, ampliando el grupo a 18 componentes.

La subida al Tourmalet fue un momento decisivo. Oier Lazkano destacó en este ascenso, coronando la cima y convirtiéndose en el primer español en lograrlo desde David de la Fuente en 2006. Este logro marcó la decimoctava vez que un ciclista español corona esta montaña. Sin embargo, en el descenso y a 62,6 kilómetros de la meta, Lazkano intentó un ataque que no prosperó, mientras que el belga Louis Vervaeke abandonaba la carrera, presumiblemente debido a una enfermedad.

La siguiente prueba de la etapa fue la subida a la Hourquette d'Ancizan, de segunda categoría. En este tramo, el francés David Gaudu (Groupama-FDJ) superó a Lazkano en la última curva, consolidando su posición en la cabeza de carrera. Mientras tanto, en el pelotón, los favoritos aún no habían mostrado sus cartas. El portugués João Almeida, del UAE Team Emirates, relevó al francés Pavel Sivakov, llevando el peso del pelotón.

A medida que se acercaban a los últimos kilómetros, la tensión aumentaba. A 7,5 kilómetros de la meta, Ben Healy mantenía una ventaja de 1:05 sobre el pelotón. Fue en este punto cuando Adam Yates lanzó un ataque, que Matteo Jorgenson no pudo contener. Este movimiento complicó la situación para el equipo Visma-Lease a Bike y especialmente para Jonas Vingegaard, quien trataba de resistir los embates de Pogacar.

La carrera se tornó aún más intensa cuando el belga Remco Evenepoel (Soudal-Quick Step) se unió a la lucha por el podio, intentando seguir el ritmo de Pogacar. Mostrando una tenacidad impresionante, Pogacar superó a Yates y cruzó la meta en solitario, asegurando su victoria con un tiempo de 4h01:52. Esta victoria le permitió a Pogacar ampliar su ventaja en la clasificación general, incrementando su margen a 1:57 minutos sobre Vingegaard, mientras que Evenepoel quedó a 2:22 minutos.

La jornada no solo destacó por los movimientos estratégicos de los ciclistas, sino también por la constante batalla por la posición y la gestión de la resistencia en una de las etapas más duras del Tour. Cada intento de fuga, cada ataque y cada respuesta del pelotón fueron indicativos de la intensidad y la competitividad que caracterizan a esta edición del Tour de Francia.

La victoria de Pogacar en esta etapa subraya su dominio en la carrera y su capacidad para manejar la presión en las jornadas más desafiantes. Su equipo, UAE Team Emirates, ha jugado un papel crucial en respaldar sus esfuerzos, asegurándose de que él se encuentre en la mejor posición posible para competir por el título general.

Mientras tanto, Jonas Vingegaard y su equipo, Team Visma-Lease a Bike, deberán reconsiderar sus estrategias para las próximas etapas si quieren cerrar la brecha con Pogacar. La actuación del danés ha sido sólida, pero necesitará algo más que consistencia para desbancar al líder esloveno.

En cuanto a los demás competidores, ciclistas como Enric Mas, David Gaudu y Remco Evenepoel han demostrado que están dispuestos a luchar hasta el final. Sus intentos de fuga y ataques en los momentos cruciales de la carrera han añadido emoción y dinamismo a la competición, garantizando que cada etapa sea impredecible y emocionante.

La etapa 14 del Tour de Francia 2024 será recordada no solo por la victoria de Pogacar, sino también por los esfuerzos colectivos de los ciclistas, los intentos audaces de fuga y la constante lucha por la supremacía en una de las carreras más prestigiosas del ciclismo mundial. Con varias etapas aún por disputarse, la batalla por el maillot amarillo continúa, prometiendo más sorpresas y momentos inolvidables en los días venideros.