Este miércoles se ha vivido el primer gran enfrentamiento parlamentario del curso político entre el jefe del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, en un pleno que destacó por los ataques directos y las posturas completamente enfrentadas. En su intervención, Feijóo no dudó en comparar la política de Sánchez con prácticas autoritarias, afirmando que la "censura y persecución" que, según él, está implementando el presidente, "no se veía desde Franco".

"La concepción bananera del poder no tiene fin"

Feijóo, en uno de los momentos más contundentes de su discurso, acusó a Sánchez de tener una "concepción bananera del poder" y de usar su autoridad para "perseguir" a jueces, periodistas y críticos. "Ha pasado de tener problemas con la verdad a tener problemas con los que la cuentan", subrayó el líder del PP, en clara alusión al Plan de Acción por la Democracia presentado recientemente por el Gobierno, al que calificó de "plan de censura". Además, reprochó a Sánchez hacer "la vista gorda" con figuras como el expresidente catalán Carles Puigdemont, quien sigue fuera de España y enfrentado a la justicia.

Feijóo también aprovechó para subrayar sus propias propuestas frente a lo que considera el desvío autoritario del Gobierno. "Mientras usted persigue a los periodistas, yo propongo guarderías gratis. Y mientras usted plantea campañas contra los jueces, yo una ley del ELA", destacó, en un intento de contrastar sus políticas con las de Sánchez.

El ataque no se limitó solo a las políticas internas de Sánchez. Feijóo también arremetió contra la política exterior del Ejecutivo, acusándolo de no reconocer oficialmente que Venezuela es un régimen dictatorial, aunque "socialistas decentes" dentro de su propio partido sí lo hacen. Este reproche está en línea con las críticas recurrentes del PP a la postura de Sánchez en cuestiones internacionales, especialmente en relación con Venezuela.

Sánchez defiende su gestión: "Este es un Gobierno de diálogo y acuerdo"

Ante las acusaciones de Feijóo, Sánchez optó por defender su gestión, destacando el carácter dialogante de su gobierno y su capacidad para sacar adelante proyectos legislativos. "Este es un Gobierno del diálogo y del acuerdo", afirmó Sánchez, quien recalcó que durante su mandato se han aprobado 12 leyes y que hay otras 30 en tramitación.

Sánchez también aprovechó para refutar las críticas de Feijóo sobre su presencia en las sesiones parlamentarias, señalando que ha comparecido en 39 ocasiones ante el Congreso en esta legislatura, mientras que Feijóo, durante su mandato como presidente de la Xunta, solo lo hizo 10 veces en 13 años. "No es que usted no sea presidente del Gobierno porque no quiera, sino porque los españoles le dijeron que debía continuar en la oposición", lanzó Sánchez en una de sus respuestas más directas al líder del PP, apelando al resultado de las últimas elecciones.

El crecimiento económico como respuesta a las críticas

En el terreno económico, Sánchez también presentó datos optimistas sobre el estado de la economía española. Señaló que el Banco de España ha elevado las previsiones de crecimiento económico al 2,8% para este año y que el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha revisado al alza las cifras de crecimiento de 2022. Estos datos, según el presidente, "invitan a la confianza y al optimismo", en contraste con la "oposición avinagrada" que, a su juicio, representa Feijóo.

Sánchez destacó que España está creciendo más que la media europea y aseguró que el país "no se rompe", como insiste la oposición, sino que está "más unido que cuando gobernaban ustedes". Este mensaje refleja el esfuerzo del Ejecutivo por presentar una imagen de estabilidad y progreso, a pesar de las múltiples crisis que han golpeado a la economía mundial en los últimos años.

Feijóo insiste: "Censura y persecución a quien ose criticarle"

Sin embargo, Feijóo no se mostró satisfecho con las respuestas del presidente. "Censura y persecución a quien ose criticarle. No se veía una cosa así desde Franco", insistió el líder popular, intensificando sus acusaciones de autoritarismo contra Sánchez. Asimismo, criticó duramente la falta de estabilidad del Gobierno, asegurando que Sánchez carece de "socios parlamentarios estables" y de un proyecto para la mayoría. "Más allá de los fontaneros de Ferraz, ¿le queda algo a usted más que su proyecto personal?", preguntó de forma retórica.

El intercambio de reproches no terminó ahí. Feijóo también cuestionó la gestión de Sánchez en cuanto a Venezuela, acusándole de evitar llamar "dictadura" al régimen de Nicolás Maduro, un tema sensible en la política exterior española. Además, en materia económica, subrayó que no fue el Banco de España quien mejoró las previsiones de crecimiento, sino el ministro José Luis Escrivá, haciendo un comentario sarcástico sobre la veracidad de las cifras.

Reivindicación de las mujeres pioneras en Europa

Otro momento destacado del enfrentamiento parlamentario ocurrió cuando Sánchez sacó pecho por el reciente nombramiento de Teresa Ribera como vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea de Transición Limpia, Justa y Competitiva. El presidente se jactó de que "jamás una mujer española" había ostentado ese tipo de responsabilidades. Sin embargo, Feijóo no tardó en recordarle que la primera mujer española en ocupar un cargo de ese calibre fue Loyola de Palacio, del Partido Popular.

La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, también intervino en esta discusión para recalcar el papel de De Palacio, exigiendo a Sánchez "respeto a las mujeres que abrieron camino, aunque no fueran de su partido". Esta reivindicación del legado de figuras históricas del PP forma parte de la estrategia del partido para subrayar sus propios logros, en contraste con los del actual Gobierno.