El líder de Vox en Cataluña, Ignacio Garriga, ha replicado al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, que la amnistía "solo es una prioridad para los delincuentes", y le ha acusado de haber abandonado a los catalanes.

"Sus prioridades están absolutamente alejadas de las preocupaciones de los catalanes", ha dicho este miércoles en su discurso de réplica en el Debate de Política General en el Parlament.

Garriga ha erigido a Vox como alternativa ante las "concesiones" que cree que PSOE y PP han hecho al independentismo a lo largo de las últimas décadas, desde el Pacto del Majestic hasta las condiciones en que se aplicó el 155 tras el 1-O.

"De repetirse otro golpe de Estado, cometerían ambos los mismos errores, porque una vez más aceptan como interlocutores básicos aquellos que tienen como objetivo destruir nuestra nación", ha asegurado.

Además, ha reprochado al líder del PSC, Salvador Illa, su silencio sobre la amnistía y el referéndum mientras siguen las "negociaciones ocultas" entre PSOE, Sumar y Junts y ERC para investir al candidato socialista, Pedro Sánchez.

ACUSA AL GOVERN DE FAVORECER LA CRIMINALIDAD

Garriga ha cargado contra las políticas del Govern en materia de educación, vivienda y clima, y lo ha acusado de haber promovido un incremento de los índices de criminalidad en Cataluña, que ha vinculado a la inmigración.

Al terminar la intervención, el diputado de ERC Jordi Orobitg ha pedido la palabra y ha tachado las palabras de Garriga de "discurso del odio"; también ha lamentado que la presidenta del Parlament, Anna Erra, no le haya llamado la atención, algo que Erra ha hecho a continuación.

CRÍTICA AL GOVERN

Garriga ha dicho que el Govern, junto a Junts y la CUP, promueven el odio "contra todos aquellos catalanes que no piensan" como Aragonès.

Garriga ha expuesto que el objetivo de Vox en la cámara catalana es y será "denunciar las consecuencias de las políticas" en torno al multiculturalismo, que, según Garriga, permiten la entrada de inmigrantes ilegales a Cataluña.

El líder catalán de Vox ha utilizado su segunda intervención para criticar la hoja de ruta del Govern, diciendo que las medidas y los impuestos del Ejecutivo catalán sirven para "acabar con la prosperidad de las familias y condenarlas a la ruina".