En solo tres meses, la inmigración ha escalado posiciones hasta convertirse en el principal problema para los españoles, según los datos del último barómetro del CIS difundido este miércoles. La preocupación por este tema ha experimentado un crecimiento meteórico, pasando del 11,2% en junio a un 30,4% en septiembre, según el sondeo elaborado a partir de 4.027 entrevistas realizadas entre el 2 y el 6 de septiembre. Este cambio refleja un giro significativo en la percepción pública, donde el paro, históricamente el tema más señalado, ha quedado relegado.

Un ascenso meteórico de la preocupación por la inmigración

El dato más llamativo de este barómetro es el ascenso de la inmigración como problema percibido por la ciudadanía. En junio, solo un 11,2% de los encuestados mencionaba la inmigración como una de sus principales preocupaciones. Sin embargo, el último estudio muestra que este porcentaje ha aumentado hasta el 30,4%, situando este tema en el primer lugar, desbancando al paro, que ahora ocupa el tercer lugar.

Este aumento en la percepción de la inmigración como un problema puede estar influido por los acontecimientos recientes en el panorama internacional y local. Las llegadas de inmigrantes a través del Mediterráneo y por la frontera sur de España han sido frecuentes en las noticias, y el debate político en torno a la gestión de la inmigración se ha intensificado. Asimismo, en el contexto europeo, la inmigración ha vuelto a ser un tema prioritario, con discusiones sobre las cuotas de acogida y la respuesta ante los desplazamientos masivos causados por conflictos y crisis económicas en el norte de África y Medio Oriente.

Los problemas económicos siguen afectando "personalmente"

A pesar del aumento en la preocupación por la inmigración, la encuesta revela una diferencia notable cuando se pregunta a los españoles cuál es el problema que más les afecta personalmente. En este caso, la inmigración baja al quinto lugar, siendo superada por los problemas económicos, la sanidad, la calidad en el empleo y la vivienda.

Este dato sugiere que, aunque la inmigración es vista como una preocupación colectiva que afecta al país en su conjunto, los ciudadanos siguen priorizando problemas más inmediatos y cercanos en su vida diaria, como la dificultad para llegar a fin de mes, la precariedad laboral o las dificultades para acceder a una vivienda.

Problemas políticos y el paro completan el podio

Además de la inmigración, otros temas siguen preocupando a los españoles. Los problemas políticos en general ocupan el segundo lugar en el ranking de preocupaciones, señalados por un 20,6% de los encuestados. Este porcentaje refleja una persistente insatisfacción con la clase política y el funcionamiento de las instituciones. No es un dato nuevo, ya que en el barómetro de julio, los problemas políticos también ocupaban el segundo lugar, aunque con un 20,7%, una leve variación.

El paro, que ha dominado durante décadas el primer puesto en las encuestas del CIS, ahora se encuentra en la tercera posición, con un 20,1%. Aunque sigue siendo un tema de gran preocupación, el descenso en el número de desempleados y las recientes mejoras en el mercado laboral podrían explicar esta bajada.

Causas de la inmigración y la desigualdad global

El 96,6% de los españoles considera que existen "muchas desigualdades entre los países pobres y ricos", un dato que refleja la conciencia social sobre las diferencias económicas y sus consecuencias. Además, el 87,3% opina que estas desigualdades son una de las principales causas del aumento de la inmigración hacia Europa y España en particular.

La percepción de que España debería hacer más para ayudar al desarrollo de las regiones pobres también es compartida por una amplia mayoría: el 72,2% de los encuestados cree que el país debería aumentar sus esfuerzos en este sentido. Este dato pone de manifiesto un sentir generalizado entre la población de que la inmigración no solo debe abordarse desde una perspectiva de control de fronteras, sino también a través de una estrategia global que ataque las causas profundas del fenómeno, como la pobreza, la falta de oportunidades y los conflictos en los países de origen.

Preocupación por los conflictos internacionales

El barómetro del CIS también revela un elevado grado de preocupación por los conflictos internacionales, especialmente por la guerra en Ucrania y la situación en Oriente Próximo. En cuanto a la invasión rusa en Ucrania, un 25% de los encuestados afirma estar "muy preocupado", mientras que el 43,2% está "bastante preocupado", lo que suma un total de dos tercios de la población mostrando una notable inquietud por el conflicto.

Por su parte, la situación en Oriente Próximo también preocupa a una parte significativa de los españoles. Un 29,6% está muy preocupado por los recientes desarrollos en la región, mientras que el 38,2% se encuentra bastante preocupado. Estos conflictos, aunque no afectan directamente a España en términos inmediatos, generan inestabilidad global y contribuyen al aumento de los flujos migratorios, lo que, como se ha visto, es uno de los temas que más preocupa a los ciudadanos.