El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha cancelado su balance anual del curso en La Moncloa y comparecerá ante la prensa el próximo martes en la residencia oficial del Rey en Mallorca. Tradicionalmente, Sánchez convoca a la prensa en estas fechas para presentar un balance anual de los logros de su gobierno, una práctica que en Moncloa se denomina "rendición de cuentas". Este año, según publica El Debate, el presidente tenía previsto realizar este informe el lunes, antes de viajar a Palma para reunirse con el Rey y comenzar sus vacaciones.

No obstante, la citación del juez Peinado, que ha llamado a Sánchez a declarar el martes por la mañana como testigo en el caso abierto contra su esposa, Begoña Gómez, ha obligado a reestructurar los planes del Gobierno. En lugar de realizar el balance anual en La Moncloa, se ha decidido que Sánchez comparezca ante la prensa el martes por la tarde en el Palacio de La Almudaina, la residencia oficial del Rey en Mallorca, después de su reunión con Don Felipe.

La elección del martes no es casualidad. Sánchez busca que la imagen que prevalezca en los medios sea la suya junto al Rey, aprovechando un entorno más controlado como es el Palacio Real de La Almudaina. En este contexto, Sánchez puede minimizar el tiempo de exposición a la prensa, llegando a la cita con el Rey a las 17.30 horas, y extendiendo la reunión tanto como lo considere necesario antes de atender a las preguntas de los periodistas.

El entorno de Mallorca también permite un mayor control sobre las preguntas de la prensa, limitando las intervenciones a unos pocos periodistas nacionales y regionales seleccionados previamente, evitando así temas incómodos que han estado presentes en la agenda mediática en los últimos meses.

Entre estos temas se encuentran:

1. Caso Begoña: Begoña Gómez, esposa del presidente, es investigada por la Justicia. Hasta ahora, tanto Sánchez como Gómez han evitado dar explicaciones públicas sobre el caso.
2. Caso hermano de Sánchez: David Sánchez, alias David Azagra, enfrenta investigaciones por fraude fiscal y otros delitos. Pedro Sánchez no ha comentado sobre esta situación.
3. Caso Koldo: Investigación sobre la compra de mascarillas valoradas en 54 millones de euros durante la pandemia, involucrando a un exasesor del exministro José Luis Ábalos.
4. Borrado del caso ERE: El Tribunal Constitucional anuló condenas relacionadas con un fraude masivo, decisión criticada por algunos sectores como muestra de impunidad.
5. Control de la prensa: Acusaciones de intentar influir en los medios con el reparto de 100 millones de euros a los que se alineen con las exigencias del Gobierno.

Estas situaciones, entre otras, han generado una serie de reveses para Sánchez, dificultando la posibilidad de un balance anual positivo sin enfrentar preguntas críticas. Además, el Gobierno enfrenta desafíos en la aprobación de leyes importantes y en mantener el apoyo de sus socios políticos, lo que refleja una situación de fragilidad en el Ejecutivo.