Pedro Sánchez recibió este lunes en la Moncloa a Volodímir Zelenski para firmar un acuerdo en materia de seguridad. El único dato conocido sobre el acuerdo es la cantidad de dinero que implicará para las arcas españolas: 1.000 millones de euros este año y aproximadamente 5.000 millones hasta 2027.

El resto de los detalles fueron adelantados por El País temprano en la mañana, pero no fueron confirmados ni desmentidos por los mandatarios de España y Ucrania durante su comparecencia conjunta. Entre los elementos mencionados se encuentran más misiles antiaéreos Patriot, adicionales a los ya enviados en abril, otros 19 carros de combate Leopard 2A4 de segunda mano y munición para las tropas.

El presidente del Gobierno se amparó en la "seguridad" para mantener "cierta confidencialidad" sobre los términos del memorándum de entendimiento, que ha generado descontento en Sumar. Este acuerdo fue aprobado el 16 de abril en el Consejo de Ministros bajo el epígrafe indeterminado "Acuerdo Marco para el suministro de diverso material para el refuerzo de capacidades militares" y no pasará por el Congreso. El portavoz del socio minoritario, Ernest Urtasun, pidió someterlo a debate y votación en la Cámara Baja. "No parece de recibo que se aprobara esto en el Consejo de Ministros sin tan siquiera saber cuál era el destino de las armas", se quejó. "Esa falta de transparencia a ojos de todo el mundo no es seria cuando estamos hablando de algo tan importante como la defensa", añadió.

"Es un memorándum de entendimiento. No es necesario pasarlo por el Congreso, no es un tratado internacional", respondió Sánchez. "Lo más importante es ayudar a Ucrania lo más rápido posible", añadió. "Es un deber y una obligación". El presidente destacó que otros nueve países ya han firmado memorandos similares antes que España.

Desde la Moncloa, Zelenski agradeció la ayuda del presidente y calificó a España como "un socio fiable". Sin embargo, también dejó claro a la comunidad internacional que toda ayuda es poca, ya que Rusia lanza más de 3.000 bombas al mes contra la población civil ucraniana, según denunció.

Ambos mandatarios se refirieron a la cumbre de paz sobre Ucrania que se celebrará en Suiza los días 15 y 16 de junio, con la participación de 90 países para buscar un final negociado, aunque la actitud de Vladimir Putin no invita al optimismo. Por parte de España irá el líder del Ejecutivo. Apenas unos días antes, el 11 de junio, habrá en Berlín una cumbre sobre la reconstrucción de Ucrania, en la que participará el ministro de Economía, Carlos Cuerpo.

Zelenski lamentó que Vladimir Putin no quiera la paz y recordó los intentos fallidos que ha habido durante los últimos dos años.

Esta es la primera visita oficial del presidente ucraniano desde el inicio de la invasión. Inicialmente estaba prevista para mediados de mayo, pero se pospuso debido a la ofensiva lanzada por Putin contra Jarkov, la segunda ciudad del país.

Zelenski fue recibido en la pista de Torrejón de Ardoz por Felipe VI, un gesto poco habitual con el que el jefe del Estado quiso evidenciar el respaldo de España al pueblo ucraniano. Los Reyes ofrecieron un almuerzo al presidente ucraniano, quien posteriormente visitará el Congreso y firmará en el libro de honor.