La afición racinguista ha decidido no quedarse en silencio ante los horarios intempestivos que dificultan la asistencia a los partidos. En una medida contundente, La Gradona de los Malditos y la Asociación de Peñas Racinguistas han anunciado que permanecerán en silencio hasta el minuto 13 del encuentro frente a la SD Eibar. Esta acción, que se llevará a cabo el próximo viernes 23 de agosto, simboliza su repulsa ante la falta de consideración hacia los seguidores del fútbol.

La Gradona de los Malditos, conocida por su incondicional apoyo y fervor hacia el equipo cántabro, ha decidido vaciar sus asientos durante los primeros 13 minutos del partido como una protesta pacífica, con la esperanza de que esta acción resuene en las altas esferas de LaLiga. El malestar entre los aficionados ha ido en aumento, ya que los horarios designados por los operadores televisivos, en connivencia con LaLiga, ignoran las necesidades de los verdaderos protagonistas del fútbol: los aficionados.

"El fútbol es para nosotros", se lee en la convocatoria de protesta lanzada por los seguidores del Racing. Y es que la asistencia a los estadios se ha visto mermada por horarios que dificultan el acceso, especialmente para aquellos que deben compatibilizar su pasión con el trabajo o recorren grandes distancias para apoyar a su equipo. Esta situación ha generado un descontento creciente, y la acción del próximo viernes es solo un reflejo de ese sentimiento.

La Gradona y las Peñas instan al resto de la afición racinguista a unirse a esta protesta, dejando sus asientos vacíos durante los primeros minutos del encuentro. Con esta medida simbólica, esperan que LaLiga reflexione sobre la importancia de priorizar el interés de los hinchas y respetar su compromiso hacia el fútbol. Además, reclaman que los partidos se programen en horarios más accesibles, principalmente durante los fines de semana, para garantizar la mayor asistencia posible.

Esta protesta busca no solo visibilizar el malestar de los aficionados, sino también abrir un debate sobre la gestión de los horarios en LaLiga, recordando que el fútbol debe seguir siendo una fiesta para todos y no solo un negocio televisivo.

La Gradona de los Malditos ha tomado la delantera en esta reivindicación, pero el mensaje es claro: el fútbol es para la afición, y es hora de que LaLiga escuche.