La selección española femenina de waterpolo ha hecho historia este sábado 10 de agosto de 2024 al conseguir su primera medalla de oro olímpica, coronándose en su tercera final tras haber obtenido previamente dos platas. La victoria frente a Australia les permite firmar la triple corona dorada y seguir la estela del primer y hasta ahora único oro de un equipo femenino español, logrado por las legendarias 'Chicas de Oro' en Barcelona 1992.

Historia dorada del deporte español. Este equipo, bajo la dirección del experimentado Miki Oca, quien ahora también presume de su propio doblete —oro olímpico como jugador en Atlanta 1996 y ahora como entrenador—, se consolida como uno de los mejores equipos españoles de todos los tiempos, sin distinción de género ni deporte. Su triple corona dorada no es una hazaña común.

El recorrido hacia este logro comenzó con la victoria en el Mundial de Barcelona 2013, un torneo que catapultó al equipo hacia el estrellato en el mundo del waterpolo femenino. En ese mundial, jugado en casa en las Piscines Bernat Picornell, el equipo comenzó a mostrar su potencial, y de aquel grupo aún sobreviven jugadoras clave como Anni Espar, Maica García, Pili Peña y la portera Laura Ester. En ese mundial, España también derrotó a Australia en la final (6-8), presagiando lo que sucedería en París.

Además de ese título mundial, el equipo ha acumulado hasta tres títulos continentales en los Europeos de Budapest 2014, Budapest 2020 y Split 2022. Estos logros son aún más notables si se considera que el equipo ha alcanzado cuatro podios continentales consecutivos, sumando el bronce en Barcelona 2018 y la reciente plata en Eindhoven 2024, un torneo en el que cayeron en los penaltis ante Países Bajos, pero lograron una revancha en París.

La victoria en los Juegos Olímpicos de París 2024 es la culminación de años de esfuerzo y perseverancia. Después de las dolorosas derrotas en las finales olímpicas de Londres 2012 y Tokyo 2020 frente a Estados Unidos, la selección española finalmente se ha alzado con el oro, y lo ha hecho con estilo.

Este oro completa la ansiada triple corona en el waterpolo femenino, un logro que sólo habían conseguido previamente en Europa Italia y Países Bajos. España ahora se une a este exclusivo club, demostrando que su waterpolo es una potencia mundial. Además, España se convierte en el segundo país, junto a Italia, en lograr que tanto su equipo femenino como masculino ganen el oro olímpico en waterpolo.

Miki Oca, el arquitecto de este éxito, se ha consolidado como uno de los grandes entrenadores de la historia del waterpolo. Desde que asumió el mando de la selección femenina en 2010, ha guiado al equipo a numerosos podios, con la notable excepción de los Juegos de Río 2016 (donde terminaron quintas) y algunos Mundiales y Europeos en los que no se alcanzó la gloria. Sin embargo, con la medalla de oro olímpica en París, Oca suma su decimotercera medalla como seleccionador, un logro impresionante que subraya su capacidad para mantener al equipo en la cima.

La victoria de las 'Guerreras del Agua' también tiene un significado especial en el contexto más amplio del deporte español. Hasta ahora, solo las 'Chicas de Oro' del hockey hierba femenino habían logrado ganar una medalla de oro en unos Juegos Olímpicos, y fue en Barcelona 1992. Treinta y dos años han pasado desde entonces, y finalmente, otro equipo femenino español ha logrado igualar esa hazaña.

El waterpolo femenino español ya había demostrado su valía con dos medallas de plata en Londres y Tokio, pero el oro en París lleva su éxito a un nuevo nivel. Además, igualan la gesta de las 'Chicas de Oro', quienes, como anfitrionas, sorprendieron al mundo en un deporte en el que España nunca había brillado antes, y que tampoco ha vuelto a hacerlo desde entonces. Ahora, el waterpolo femenino español tiene la oportunidad de continuar escribiendo su propia historia dorada, con la esperanza de que esta sea solo la primera de muchas más medallas de oro en los años venideros.