El Ministro de Asuntos Exteriores británico, David Cameron, ha expresado su posición en relación con la posible imposición de un embargo inmediato en el suministro de armamento a Israel. En declaraciones ofrecidas hoy a varios medios locales, incluyendo el canal Sky News, Cameron enfatizó que tal medida podría tener consecuencias contraproducentes.

Según Cameron, "imponer un embargo inmediato en el suministro de armamento a Israel tan solo reforzaría al grupo islamista Hamás y no sería una medida sensata". Al ser cuestionado sobre las recientes amenazas del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, respecto a la posibilidad de dejar de enviar armas a Israel en caso de una invasión a gran escala en Rafah, Cameron subrayó las diferencias entre las políticas de suministro de armas de Estados Unidos y el Reino Unido.

"Estados Unidos es un suministrador estatal de armamento masivo para Israel, mientras que el Reino Unido proporciona menos del 1 % del armamento de Israel y no es un suministrador estatal", señaló el ministro. Agregó además que el Reino Unido cuenta con un sistema de licencias que pueden cerrarse en caso de considerarse un riesgo serio de violaciones internacionales a los derechos humanos.

Cameron recordó también un episodio reciente en el que se vio obligado a declarar un embargo de armamento inmediato, que resultó en un ataque masivo por parte de Irán contra Israel. "Así que no creo que hubiera sido un camino sensato, y sigo pensando que no sería un camino sensato", explicó.

El exjefe del Ejecutivo de Londres destacó la importancia de permitir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza y expresó su insatisfacción con la manera en que Israel ha abordado esta cuestión. Consideró que sería "una equivocación" que Israel llevara a cabo una ofensiva completa en Rafah sin tener un plan adecuado para proteger a la población civil.