Comida picante, alimentos ricos en sodio y grasas saturadas, y helados cargados de azúcar son algunos de los culpables según expertos en medicina del sueño.

Descubre qué evitar para garantizar un descanso reparador:

En la búsqueda de una buena noche de sueño, la dieta juega un papel fundamental que a menudo se subestima. Aunque los hábitos de alimentación no son el único factor que influye en la calidad del sueño, ajustar lo que comemos puede ser una de las maneras más inmediatas de mejorar el descanso nocturno. Recientes estudios y opiniones de expertos de The Huffington Post han puesto el foco en ciertos alimentos que pueden interferir con nuestro sueño, y aquí te desglosamos los principales culpables.

1. Comida picante: Un despertador nocturno

La comida picante, como burritos, alitas de pollo con salsa de curry, wasabi o chimichurri, puede ser especialmente perjudicial para el sueño. El ácido gástrico tiende a estar más elevado por la noche, y los alimentos picantes exacerban esta condición, lo que puede provocar reflujo ácido. Según el Dr. Ruchir P. Patel, director médico del Instituto del Insomnio y el Sueño de Arizona, “el cerebro se despierta en exceso” como resultado de este malestar. Evita estos alimentos al menos dos horas antes de acostarte para reducir el riesgo de interrupciones en tu sueño.

2. Altos en sodios y grasas saturadas: Pizza y hamburguesas

La comida rápida como pizza y hamburguesas, conocidas por su alto contenido en sodio y grasas saturadas, también puede jugar en contra de un buen descanso nocturno. Estos alimentos tardan más en digerirse, lo que puede llevar a molestias estomacales que afectan el sueño. El Dr. Patel aconseja evitar estos alimentos al menos tres horas antes de acostarse. Espaguetis con salsa de tomate pueden desencadenar reflujo ácido de forma similar a la comida picante, así que también es mejor evitarlos por la noche.

3. Helado: Un postre que desvela

Aunque el helado es un postre popular, especialmente en verano, su alto contenido en azúcar puede interferir con el sueño. El Dr. Raj Dasgupta, médico de la clínica Sleep Advisor, señala que “el azúcar puede causar fluctuaciones en el nivel de glucosa en sangre y molestias estomacales, lo que te mantendrá alerta a la hora de acostarte”. El helado de chocolate es particularmente problemático debido a su combinación de grasa, azúcar y cafeína, que puede hacer que te resulte aún más difícil relajarte antes de dormir.

4. Leche: ¿Un mito contra la calidad del sueño?

Contrario a la creencia popular, tomar un vaso de leche antes de acostarse no siempre es beneficioso para dormir mejor. El Dr. Patel explica que la lactosa en la leche puede provocar reflujo ácido en personas sensibles, lo que puede perturbar el sueño. Si eres propenso al reflujo, considera sustituir la leche de origen animal por una alternativa de leche vegetal, que puede ser menos irritante para el sistema digestivo y menos probable que interfiera con tu sueño.