La selección española de tenis comienza este miércoles su andadura en las Finales de la Copa Davis con el objetivo de estar entre los ocho mejores equipos del mundo. Bajo la dirección de David Ferrer, el equipo contará con Carlos Alcaraz, número tres del mundo, como gran líder en esta fase de grupos en la que enfrentará a República Checa, Australia y Francia. El sueño: clasificarse para las finales en Málaga, del 19 al 24 de noviembre, y dejar atrás el tropiezo del año pasado.

Alcaraz, el as bajo la manga de Ferrer

El murciano llega al torneo tras un año brillante en el que ha conquistado Wimbledon, Roland Garros y la plata olímpica. Sin embargo, su reciente gira estadounidense ha sembrado dudas sobre su estado físico y mental, tras caer prematuramente en Cincinnati y el US Open, donde él mismo calificó su actuación como "el peor partido" de su carrera. Pese a este bajón, Alcaraz está listo para darlo todo. "Mentalmente, llego con muchas ganas, motivado, y físicamente he trabajado duro para estar a un buen nivel", afirmó en la previa.

Rivales complicados, pero superables

El primer rival será República Checa este miércoles, un equipo que en 2023 superó a España en esta misma fase. Aunque ya no cuenta con estrellas como Tomas Berdych, los checos están liderados por el prometedor Jiri Lehecka y el talentoso Tomas Machac, reciente campeón olímpico en dobles mixtos. España, empujada por el factor local, confía en revertir el resultado del año pasado.

El viernes, la 'Armada' se enfrentará a Francia, diez veces campeona del torneo, pero con ausencias importantes como Adrian Mannarino y Gael Monfils. Ugo Humbert será su gran amenaza en individuales, mientras que el dobles estará cubierto por veteranos como Pierre-Hugues Herbert y Édouard Roger-Vasselin.

El domingo, España cerrará su fase de grupos contra Australia, finalista de la última edición. Pese a la baja de última hora de Alex de Miñaur, el equipo oceánico sigue siendo peligroso con Thanassi Kokkonakis y el sólido Jordan Thompson.

Ferrer confía en su equipo

David Ferrer, en su debut como capitán, tiene claro que será una batalla difícil. "Va a ser una eliminatoria muy dura. Tanto Francia como Australia tienen un grandísimo dobles, y esto en la Copa Davis cuenta mucho", señaló en la previa, dejando claro que aunque no hay favoritos, España tiene las armas para estar en Málaga.

Con el apoyo de su público y la motivación de borrar el mal sabor de boca de 2023, España inicia el asalto a su séptima 'Ensaladera'.