Bruselas, 10 ene (EFE).- La asistencia de la Unión Europea (UE) para consolidar el Estado de Derecho en los países de los Balcanes Occidentales se ha traducido en pocas "reformas fundamentales", según un informe especial publicado este lunes por el Tribunal europeo de Cuentas.

Aunque en la región se han producido "algunas reformas técnicas y operativas, en un contexto de escasa voluntad política y falta de compromiso, el apoyo de la UE ha sido, en gran medida, insuficiente para abordar problemas persistentes en ámbitos como la independencia del poder judicial, la concentración de poder, la interferencia política y la corrupción", afirman los auditores.

En particular hubo algunos cambios positivos en Albania y Macedonia del Norte, pero el progreso en general es limitado.

El informe analiza el apoyo que la UE ha otorgado durante años para aplicar los programas de reforma del Estado de Derecho en Albania, Macedonia del Norte, Montenegro y Serbia, así como a Bosnia y Herzegovina y Kosovo, que aspiran a entrar en la UE.

Esa asistencia se ha estructurado en torno a dos líneas de acción: un apoyo financiero por valor de unos 700 millones de euros entre 2014 y 2020, y el diálogo político.

En particular, el informe concluye que las medidas para abordar la limitada capacidad administrativa y voluntad política "son demasiado escasas y a menudo ineficaces".

Además, la aplicación de las condiciones previas para la financiación y la ejecución de los proyectos "no fue sistemática", afirman.

Por otro lado, según los auditores, la UE "raramente aprovecha la posibilidad de suspender la ayuda si un beneficiario infringe los principios básicos de la democracia, el Estado de Derecho y el respeto de los derechos humanos".

Otra crítica es que el apoyo europeo a la sociedad civil "es insuficiente para satisfacer las necesidades" y se basa, "sobre todo, en proyectos a corto plazo".

Pese a ello, el tribunal de cuentas considera que hay aspectos positivos en ese apoyo europeo.

"No todo está mal (...) no recomendaríamos en absoluto poner fin a estas acciones", indicó este lunes en rueda de prensa uno de los responsables del informe.

Para solucionar los problemas existentes, los auditores recomiendan un enfoque "a medida" que tenga en cuenta el contexto en cada país y fije objetivos estratégicos, así como condicionar las inversiones, por ejemplo en infraestructuras o en desarrollo rural, a los progresos en el área del Estado de Derecho, además de aumentar el apoyo a la sociedad civil. EFE

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