Pamplona, 28 ene (EFE).- Osasuna completó este viernes la última sesión de entrenamiento de la semana tras la derrota en el amistoso del jueves ante el Alavés con la baja de Kike Barja por unos problemas musculares, que parece que le dejarán fuera del próximo choque liguero ante el Sevilla en El Sadar.

El extremo navarro salió del campo lesionado en el minuto 60 con claros gestos de dolor y el club anunció que sufrió unas molestias en la región de la musculatura isquiotibial derecha y que se le harán pruebas complementarias.

Por ello, Jagoba Arrasate pierde a un hombre importante en el costado derecho, posición que podría ocupar un Chimy Ávila que dejó muy buenas sensaciones en esa demarcación en la cita frente al Granada.

El técnico vasco dirigió un entrenamiento que consistió en una breve activación, técnica, posesión, partido de fútbol y finalizaciones en las que no estuvieron Aridane y Oier. El primero, porque continúa con su trabajo específico para restablecerse de una lesión, y el segundo, porque continúa cumpliendo el protocolo sanitario tras dar positivo de coronavirus esta misma semana.

El equipo reanudará los entrenamientos el próximo lunes a las 11:00 horas en Tajonar en una sesión que volverá a desarrollarse a puerta abierta con la mira puesta en el Sevilla, que visitará Pamplona el próximo sábado 5 de febrero. EFE

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