En una iniciativa de preparación ante riesgos nucleares, radiológicos, biológicos y químicos (NRBQ), la Guardia Civil ha concluido un exhaustivo curso de formación en la sede de la Zona de Cantabria, el cual incluyó un simulacro final realizado en el Puerto de Santander.

El curso, dirigido a 26 agentes de diversas Unidades de Seguridad Ciudadana de Cantabria, Asturias, Palencia, Burgos y Vizcaya, fue impartido por la Unidad Central Operativa NRBQ en colaboración con personal especializado de la zona. Según declaraciones de la Guardia Civil, la capacitación de los agentes en la identificación temprana y manejo de incidentes NRBQ es crucial para minimizar daños y proteger a la población civil.

"La formación de nuestros agentes es esencial para enfrentar eficazmente incidentes NRBQ, garantizando la seguridad y coordinación necesaria en situaciones de riesgo", afirmó un portavoz oficial.

El curso, estructurado en fases teóricas y prácticas, se extendió del 10 al 14 de junio, abarcando temas desde la detección precoz hasta la gestión del área de riesgo y evacuación de afectados. La culminación de esta capacitación tuvo lugar con un simulacro en el Puerto de Santander, donde se evaluaron las habilidades adquiridas por los participantes.

El ejercicio simulado incluyó la respuesta ante la amenaza de un incidente con potenciales efectos nucleares, radiológicos, biológicos o químicos, destacando la capacidad de la Guardia Civil para establecer perímetros de seguridad, inspeccionar la amenaza y proceder con la descontaminación de los agentes involucrados.

Con cerca de 2.500 miembros capacitados en NRBQ en unidades desplegadas por todo el país, la Guardia Civil se posiciona como una de las fuerzas policiales mejor preparadas a nivel global para afrontar emergencias de esta naturaleza.