La lucha prolongada de los habitantes de la urbanización Entrelindes en Liencres, que pendía de un hilo judicial desde el año 2001, ha recibido un alivio significativo. Roberto Media, el consejero de Fomento, Vivienda, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, acompañado por Víctor Gil, director general de Urbanismo y Ordenación del Territorio, y Carlos Caramés, alcalde de Piélagos, anunció la decisión del Juzgado que redefine el futuro de estas viviendas.

La resolución del juzgado destaca que, a pesar de que las viviendas no se convierten automáticamente en legales, este es el primer escalón hacia la regularización, una situación que se podría rectificar con la emisión de las correspondientes licencias en el futuro. "Este es el primer paso hacia la legalización de estas viviendas que se da en Piélagos en muchos años", explicó Media.

El fallo judicial, que encontró una causa de imposibilidad legal para llevar a cabo el derribo, es una victoria para los propietarios que enfrentaban la angustia de perder sus hogares. Aunque las viviendas aún se encuentran técnicamente fuera de ordenación, la sentencia abre la puerta a futuras acciones que podrían eventualmente regularizar su situación.

"No es un paso definitivo", advirtió Media, señalando que aún existe la posibilidad de apelación ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia en los próximos 15 días. Sin embargo, enfatizó la importancia del avance, que alivia temporalmente la incertidumbre que ha plagado a los residentes durante más de dos décadas.

El gobierno regional ha trabajado diligentemente para abordar este y otros casos similares, como parte de una iniciativa más amplia para resolver problemas urbanísticos históricos. La Ley de Medidas Fiscales y Administrativas, respaldada por los grupos parlamentarios popular y regionalista, ha sido fundamental en este proceso, permitiendo ajustes legislativos que facilitan soluciones a situaciones complejas como la de Entrelindes.

En la misma línea, Carlos Caramés expresó un renovado optimismo: "Hoy se abre un halo de esperanza para 20 familias", refiriéndose al alivio que esta decisión representa para los afectados. Mientras que, desde el punto de vista técnico y legal, aún se requieren pasos adicionales para la legalización definitiva, el Ayuntamiento de Piélagos ya está trabajando para adaptar su Plan General de Ordenación Urbana a los nuevos desarrollos.

La Consejería, bajo la dirección de Media, también espera resoluciones favorables para otras sentencias pendientes que afectan a la comunidad, manteniendo un enfoque prudente pero optimista. "Si es así, estas familias podrían dormir tranquilas porque llevan demasiados años afectados por un tema que ellos no generaron", concluyó Media, subrayando el compromiso del Gobierno con la justicia y el bienestar ciudadano.

Este caso no solo refleja los desafíos del urbanismo y la administración de justicia en Cantabria, sino que también destaca la capacidad del Gobierno regional de responder a los dilemas legales de una manera que prioriza el bienestar humano y la estabilidad social, prometiendo un futuro más seguro para los residentes de Entrelindes.