El equipo de gobierno PRC/PSOE se reunió este martes con los vecinos de Castro-Urdiales que habían recogido firmas para detener las actuaciones previstas para los castaños en el Corro Campíos. La planificación inicial incluía la poda de todos los árboles, así como la tala y sustitución de dos ejemplares más deteriorados.

Durante el encuentro, se informó a los vecinos que se continuará con la poda en verde, recomendada para esta época del año, y la poda de seguridad para eliminar ramas enfermas y muertas, con el objetivo de reducir al máximo el riesgo de accidentes. Además, se procederá a vallar la zona.

También se plantarán magnolios de porte medio en los alcorques vacíos de la plaza del corro. La alcaldesa, María Teresa Noceda Llano, expresó su preocupación por la seguridad de las personas que transitan por la zona y anunció que se solicitará una nueva consulta técnica para los ejemplares más deteriorados, buscando mantener un clima de diálogo y mesura en el pueblo.

En la reunión, se detallaron las tres opciones del informe técnico con el que cuenta el Ayuntamiento:

Primera opción: Realizar podas de seguridad y apuntalamiento con elementos auxiliares, minimizando el riesgo pero sin abordar el problema de fondo.

Segunda opción (elegida por el Ayuntamiento): Realizar podas progresivas y de seguridad, aplicar fungicidas, instalar elementos de seguridad y sustituir los dos ejemplares más deteriorados por dos castaños de gran porte de 15 años y 8 metros de altura.

Tercera opción: Apeo y sustitución de cuatro ejemplares, opción que fue descartada desde el inicio para proteger y conservar el mayor número de árboles posible.