En un acto de marcada determinación política, Isabel Díaz Ayuso ha salido en firme defensa de Javier Milei ante los recientes ataques del Gobierno central, al tiempo que subraya la potestad de la Comunidad de Madrid para honrar a líderes internacionales. La controversia surgió tras la decisión de Ayuso de otorgar a Milei la Medalla Internacional de la región, una acción que el Ejecutivo de Pedro Sánchez calificó de provocativa, desatando acusaciones de deslealtad institucional por parte de la vicepresidenta primera, María Jesús Montero.

Desde el emblemático Parque de Berlín, donde se congregaron miles de simpatizantes y afiliados del Partido Popular de Madrid para celebrar el primer aniversario de su mayoría absoluta regional, Díaz Ayuso aprovechó la ocasión para criticar lo que considera un trato desigual respecto a las embajadas catalanas financiadas desde diversas partes de España, frecuentemente ignorando otras regiones.

En un discurso enérgico, la presidenta madrileña alertó sobre lo que percibe como una peligrosa tendencia hacia el chavismo en el Gobierno de Pedro Sánchez. "Sanchismo es chavismo. No lo olvidemos. Es así como nos gobernarán", advirtió, haciendo hincapié en la centralización del poder y la erosión de los contrapoderes democráticos, tomando como referencia la situación en países como Venezuela.

Además, Ayuso recordó el compromiso histórico del Partido Popular de Madrid con la comunidad argentina, resaltando las similitudes y diferencias entre los proyectos del PP y los de Javier Milei, así como entre España y Argentina. Afirmó que mientras que el presidente argentino no ha insultado a España ni al Rey, ha visto a "media mitad del Gobierno" hacerlo, en alusión a otros líderes populistas y dictatoriales en América.

Javier Milei, por su parte, llamó a los españoles a "despertar" contra Sánchez y elogió a Ayuso por su "enorme batalla" contra lo que describió como intentos de "blanquear" casos de corrupción dentro del Ejecutivo. La presidenta madrileña también se refirió a los presuntos casos de corrupción que han rodeado al entorno cercano de Sánchez, subrayando que todos, incluyendo al presidente y su familia, deben ser iguales ante la ley.

Al cerrar el evento, José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, enfatizó la clara oposición entre el modelo político liderado por Pedro Sánchez y el representado por Madrid. Destacó que la región se ha convertido en "el principal ariete político y democrático para lograr que Pedro Sánchez deje la presidencia del Gobierno lo antes posible", apoyándose en la Constitución y el principio de convivencia como pilares fundamentales para el desarrollo de la sociedad.

En conclusión, el evento organizado por el PP de Madrid no solo sirvió como plataforma para reafirmar la posición de Ayuso y sus aliados frente al Gobierno central, sino también como un llamado a la acción para los seguidores del partido en la capital y más allá, en un momento clave para la política española contemporánea.