La concentración convocada por redes sociales el pasado viernes en la calle Ferraz de Madrid, ha desatado una reacción en diversas ciudades españolas en las que los ciudadanos acuden a manifestarse frente a las distintas sedes del Partido Socialista para mostrar su desaprobación a la negociación que el PSOE está llevando a cabo con los partidos independentistas para lograr la investidura de Pedro Sánchez, que incluye la ley de amnistía, la condonación de 15.000 millones de la deuda de Cataluña con el FLA o el traspaso de Rodalies -el cercanías catalán-.

Miles de personas se congregaron nuevamente frente a varias sedes del PSOE en España para expresar su rechazo a la ley de amnistía que el presidente Pedro Sánchez negocia con Junts desde Bruselas. La manifestación en la sede madrileña en la calle Ferraz se vio marcada por la represión policial, con cargas y el uso de gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.

Cerca de 3,800 personas, según la Delegación de Gobierno, se unieron por tercera vez para protestar contra los acuerdos de Sánchez con los independentistas. La jornada resultó en la detención de una persona por desobediencia y atentado contra la autoridad. Los manifestantes expresaron su descontento con consignas como 'Puigdemont a prisión', 'Pedro Sánchez a prisión', 'Traidor' o 'España no se vende'.

Imagen de la Policía en la calle Márques de Urquijo, perpendicular a Ferraz

La ley de amnistía en discusión ha generado controversia al incluir medidas que favorecerían a los procesados del 'procés' catalán, el traspaso de competencias de Rodalíes y la condonación de hasta 15,000 millones de euros de deuda del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) a Cataluña.

Vox respaldó las manifestaciones y llamó a una movilización "permanente" contra los planes del gobierno. Santiago Abascal, líder de Vox, se unió a la manifestación en la sede de Madrid, acompañado por el vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, y otros dirigentes del partido.

Las protestas se extendieron a otras ciudades como Barcelona, Badajoz, Sevilla, Valencia, El Puerto de Santa María, Oviedo, Zaragoza y Tarragona, convocadas por la asociación juvenil Revuelta. Los manifestantes expresaron su rechazo a la amnistía y demandaron que España no se someta a la voluntad de secesionistas.

Un detenido por atentado contra la autoridad en la concentración en Ferraz

Unas 3.800 personas –según datos de la Delegación de Gobierno de Madrid– se han concentrado por tercera vez a la puertas de la sede nacional del PSOE en la calle Ferraz clamando contra los pactos del candidato socialista a la investidura, Pedro Sánchez, con los independentistas y contra la ley de amnistía ya pactada con ERC y en vías de negociación con Junts, que ha dejado además un detenido por desobediencia y atentado contra la autoridad, según han confirmado a Europa Press las citadas fuentes.

A la protesta han acudido además el líder de Vox, Santiago Abascal y el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, donde se han vivido momentos de tensión cuando los miles de asistentes han tratado de volcar las vallas de seguridad que la Policía Nacional ha dispuesto para mantener a los manifestantes alejados de la puerta de la sede del PSOE.

Agentes de la Policía Nacional intervienen durante la concentración de este lunes frente a la sede del PSOE en la calle Ferraz. EFE/ J.P. Gandul

La jornada dejó un detenido por desobediencia y atentado contra la autoridad. Los manifestantes, al igual que en las anteriores concentraciones, han expresado su descontento con consignas como 'Puigdemont a prisión', 'Pedro Sánchez a prisión', 'Traidor' o 'España no se vende'.

Entre los acuerdos que busca Sánchez con los independentistas se incluyen medidas controvertidas, como una ley de amnistía que favorecería a los procesados del 'procés' catalán, el traspaso de competencias de Rodalíes y la condonación de hasta 15,000 millones de euros de deuda del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) a Cataluña.

Vox ha respaldado las manifestaciones y ha llamado a una movilización "permanente" contra los planes del Ejecutivo. El líder de Vox, Santiago Abascal, se unió a la protesta en la sede de Madrid, acompañado por el vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, y otros dirigentes del partido.

Las protestas se han extendido a diversas ciudades de España, convocadas por la asociación juvenil Revuelta, que aboga por la "movilización constante". La situación ha generado tensiones políticas evidentes, subrayando la creciente resistencia y descontento en el país ante los acuerdos en discusión.

Estos eventos destacan la creciente resistencia y descontento en diferentes partes de España ante los acuerdos políticos en discusión, con la represión policial en Ferraz marcando un capítulo tenso en la actualidad política del país.