El margen para tomar esta decisión terminaba el 15 de julio y, aunque permitieron que Rocha concluyera su labor durante la Eurocopa y las celebraciones posteriores, la inhabilitación se ha hecho efectiva.

El principal motivo de esta decisión ha sido el despido de Andreu Camps como secretario General de la Federación, algo que el anterior gobierno del Consejo Superior de Deportes había solicitado tras el deseo expreso de las campeonas del mundo de continuar en la selección solo si ciertos miembros del 'staff' federativo abandonaban sus cargos, entre ellos Camps.

Sanciones y consecuencias

Pedro Rocha podría solicitar la cautelar de la inhabilitación al Tribunal de lo Contencioso Administrativo. La sanción, de dos años, le impide presentarse a las elecciones programadas para septiembre y lleva aparejadas dos sanciones económicas de 16.000 euros por faltas muy graves según el TAD. Además, este proceso retrasará la convocatoria de elecciones, ya que la junta gestora que surja de este movimiento deberá nombrar primero un presidente dentro de la actual asamblea.

Desde el Consejo Superior de Deportes (CSD) siempre tuvieron claro que Rocha no era la persona adecuada para liderar la Federación, basándose en la legalidad de su nombramiento. El presidente del CSD, José Manuel Uribes, no ocultaba su opinión al respecto. Curiosamente, el resto de la gestora no ha recibido sanción alguna.

Yaye, la sustituta

María Ángeles García Chaves, conocida como Yaye, vicepresidenta primera de la Federación y con cargo ejecutivo, asumirá la presidencia de la junta gestora tras la inhabilitación de Rocha. Graduada en Ciencias del Deporte y entrenadora en la cantera, Yaye siempre ha promovido la idea de que "el fútbol es una forma de vida".

Yaye comenzó su carrera futbolística a los 9 años como portera en el equipo de su colegio, el San Francisco, impulsada por su hermana. Entrenaba con los niños hasta que fue fichada por el San Francisco, donde jugó siete temporadas y comenzó a destacar como mediocentro. "Me gustaba mucho correr, era un pulmón", recuerda.

Futuro incierto para la Federación

Este cambio en la cúpula de la Federación Española de Fútbol abre un período de incertidumbre y transición. La junta gestora deberá actuar con rapidez para estabilizar la situación y preparar el terreno para las próximas elecciones. Con Yaye al frente, se espera una nueva era en la que se priorice la legalidad y la transparencia en la gestión de la Federación.