El nuevo radar de tramo de Saltacaballo, ubicado en la A-8 (autovía del Cantábrico) entre el viaducto de Ontón y Castro Urdiales (Cantabria), ya tiene fecha para empezar a sancionar los excesos de velocidad. Este dispositivo, que cubre más de 6 kilómetros, se destaca por ser uno de los más largos de España y comenzará a operar a partir del próximo mes de agosto.

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha mostrado una clara preferencia por los cinemómetros de tramo, instalando varias decenas de estos dispositivos en las carreteras españolas hasta finales de 2024. Entre ellos, el radar de tramo de Saltacaballo en la A-8 se posiciona como uno de los más significativos debido a su extensión.

Ubicación y funcionamiento

Este radar cubre un tramo de 6 kilómetros entre el viaducto de Ontón y Castro Urdiales y sustituirá a un radar fijo que tenía un límite de velocidad de 80 km/h. El nuevo dispositivo estará limitado a 100 km/h, 20 km/h menos que el límite común para las vías de alta capacidad en España.

Inicio de las sanciones

Aunque el radar comenzará a funcionar en agosto, fuentes de la DGT han indicado que se concederá un plazo inicial en el que solo se enviarán avisos a los conductores que excedan la velocidad establecida. Las sanciones económicas empezarán a aplicarse en otoño de este año, momento en el que los conductores que no respeten los límites recibirán las correspondientes multas.

Además de su longitud, el radar de Saltacaballo reemplazará un radar fijo, mejorando así el control de velocidad en este tramo. La A-8 ya cuenta con otros radares de tramo, como el dispositivo entre los kilómetros 505 y 506 (entre Ribadeo y Figueras, en el límite entre Asturias y Galicia) y otro entre los kilómetros 545,9 y 550,2 (entre las localidades lucenses de Mondoñedo y O Fiouco), ambos limitados a 100 km/h.

Una revolución en seguridad vial

Este radar forma parte de un esfuerzo más amplio por parte de la DGT para mejorar la seguridad vial en España mediante la instalación de radares de tramo en puntos estratégicos. Con su implementación, se espera una reducción significativa de los accidentes y un aumento en el cumplimiento de las normas de tráfico.

El radar de Saltacaballo, por su longitud y ubicación, se presenta como un avance crucial en la vigilancia y control de velocidad en la A-8, reforzando la seguridad de una de las autovías más importantes del país. ¡Atención conductores! A partir de agosto, habrá que prestar especial atención a los límites de velocidad en este tramo para evitar sorpresas desagradables en forma de sanciones.