El Ayuntamiento de Santander ha inaugurado oficialmente las obras de construcción de un dique de 370 metros en el barrio Santiago El Mayor, en Nueva Montaña, destinadas a evitar inundaciones recurrentes en la zona. La alcaldesa, Gema Igual, visitó el área para comprobar los resultados de esta intervención y destacó que, a partir de ahora, se minimizarán los riesgos de desbordamientos de la Ría de Raos, una fuente habitual de problemas en épocas de lluvias intensas.

Un proyecto de protección en solitario

La regidora subrayó que el Ayuntamiento de Santander ha llevado a cabo este proyecto de manera independiente, a pesar de que la Ría de Nueva Montaña afecta a diversas administraciones, como el Gobierno central, Costas y Carreteras, el Puerto de Santander, el Ayuntamiento de Camargo y otras entidades. Este esfuerzo responde al compromiso adquirido en diciembre de 2020, cuando una gran inundación afectó al barrio tras lluvias torrenciales, obligando al Consistorio a implementar una solución temporal.

En aquel entonces, se aumentó una barrera de contención y se utilizaron sacos para evitar el desbordamiento. Sin embargo, el Instituto de Hidráulica concluyó, tras un estudio, que la única solución a largo plazo era la construcción de un dique de protección definitivo. Este proyecto fue finalmente adjudicado a la empresa Rucecan por un coste de 350.000 euros, aunque se enfrentó a retrasos debido a la necesidad de obtener permisos de los vecinos y la interrupción de las obras por parte de Viesgo, que realizó una canalización en la misma área.

Características del Dique

El nuevo sistema de protección consta de dos tramos diferenciados. El primero, situado en la calle Barrio Nueva Montaña - Isla del Óleo, incluye un muro de hormigón armado de 170 metros lineales, destinado a proteger la zona oeste del barrio. El segundo tramo es un dique de tierras de 199 metros que bordea la margen izquierda de la Ría de Raos y ofrece protección a la zona este, ubicado entre la misma calle y el parque junto a la Estación de Bombeo de Aguas de Lluvia.

Este dique, que incluye taludes revegetados para integrar la estructura en el paisaje, proporciona estabilización adicional y, en su parte superior, se ha construido una senda peatonal, que servirá tanto para la movilidad de los vecinos como para el acceso a futuras inspecciones de mantenimiento.

Un estudio para el mantenimiento de la Ría

Además de la finalización del dique, el Ayuntamiento de Santander ha encargado a la Fundación Naturaleza y Hombre un estudio para identificar las acciones necesarias para mantener la Ría de Raos en buen estado, evitando la acumulación de sedimentos y desechos que puedan obstruir las tuberías y causar nuevas inundaciones. Este informe, que estará listo en aproximadamente un mes y medio, establecerá las responsabilidades de las diferentes administraciones involucradas en el mantenimiento de la ría.

Gema Igual recalcó que es esencial "mantener el sistema en perfecto estado de conservación" para evitar que el problema se repita. "No podemos esperar a acordarnos solo cuando llueve, sino que debemos tener un protocolo claro de mantenimiento", afirmó la alcaldesa.

Agradecimientos a los vecinos

La alcaldesa aprovechó la ocasión para agradecer a los vecinos de Nueva Montaña por su paciencia y comprensión durante los retrasos en las obras. Destacó que, aunque la ejecución ha llevado más tiempo del previsto, debido a las interrupciones y permisos necesarios, el resultado final proporciona una solución duradera a los problemas de inundación que han afectado a la comunidad durante años.

Un paso hacia la seguridad

Con la construcción de este dique, el Ayuntamiento de Santander busca garantizar la seguridad y tranquilidad de los residentes de Santiago El Mayor frente a futuros episodios de lluvias intensas. El camino peatonal añadido en la coronación del dique no solo facilitará el acceso, sino que también mejorará la integración del barrio con el entorno natural que rodea la ría.

El objetivo a partir de ahora es implementar un protocolo de revisiones periódicas para asegurarse de que las arquetas y tuberías estén siempre limpias y operativas, previniendo cualquier riesgo de desbordamiento en el futuro.

Este proyecto subraya el compromiso del Ayuntamiento con el bienestar de los ciudadanos, asegurando que las infraestructuras críticas estén preparadas para enfrentar los desafíos del clima y el medioambiente.