La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Santander se reunirá el próximo lunes, 29 de julio, para aprobar la liquidación definitiva del contrato de limpieza viaria y recogida de residuos. Este acuerdo también incluye la determinación de los daños y perjuicios causados a la administración local, los cuales resultan en un saldo favorable para el Consistorio de 6,9 millones de euros. Este paso marca la culminación de un extenso y complejo proceso administrativo que ha durado varios años.

El Ayuntamiento de Santander ha comunicado que con esta resolución se dará por finalizado el expediente abierto relacionado con la fórmula de cálculo de la plantilla que la UTE Cuida Santander, la unión temporal de empresas encargada del servicio, debía mantener. Este contrato, inicialmente suscrito en 2013, fue objeto de resolución en octubre de 2021, a raíz de un dictamen emitido por el Consejo de Estado. Este dictamen concluyó que la UTE había incumplido varias de las obligaciones esenciales del contrato, lo que llevó a la decisión de terminar el acuerdo por causas imputables al contratista.

La determinación de los daños y perjuicios que la UTE Cuida Santander debe indemnizar al Ayuntamiento asciende a la considerable cantidad de 10 millones de euros. Este importe incluye una serie de conceptos detallados que reflejan las diversas áreas en las que se produjeron incumplimientos y déficits en la prestación del servicio. Según el desglose proporcionado por el Ayuntamiento, el déficit de plantilla respecto a lo ofertado por la UTE asciende a 2,7 millones de euros. Las bajas de más de siete días no cubiertas suponen un perjuicio adicional de 2,1 millones de euros. Además, se identificó un déficit de medios por valor de 629.000 euros y problemas en la recogida de cartón que se cuantifican en 11.000 euros.

Otros conceptos incluidos en el cálculo de los daños son la falta de implementación de una plataforma informática, que representa un costo de 313.000 euros, y la inversión no realizada en papeleras, cuantificada en 38.000 euros. Las campañas divulgativas, que eran parte integral del contrato, no se llevaron a cabo adecuadamente, generando un déficit de 441.000 euros. También se identificaron incumplimientos en la dotación de playas, que suman 23.000 euros, y el alquiler de la maquinaria necesaria para el servicio, que el Ayuntamiento tuvo que sufragar debido a la falta de compromiso de la UTE en facilitar su inspección y entrega, lo que supuso un coste de 3,7 millones de euros.

El Consejo de Estado estableció que el importe de los daños y perjuicios se hará efectivo, en primer término, utilizando la garantía prestada por el contratista, la cual asciende a 7,9 millones de euros. El exceso de esta cantidad se compensará con el importe de la liquidación favorable a la UTE, que debe ser retribuida por valor de 3,1 millones de euros. Esta cifra incluye los trabajos realizados en los meses de octubre y noviembre de 2021, conforme al canon previsto que suma 1,8 millones de euros. También se incluye la revisión de precios del contrato, que se actualizaba anualmente y asciende a 106.000 euros, y la amortización pendiente de la maquinaria y otros medios por los dos años restantes del plazo de vigencia del contrato, que suma 1,2 millones de euros.

Es relevante mencionar que la maquinaria utilizada para la prestación del servicio fue aportada por el contratista y, al finalizar el contrato, pasó a ser propiedad municipal. Para la preparación de este acuerdo, el Ayuntamiento de Santander constituyó, de manera previa, una comisión liquidadora integrada por tres funcionarios públicos. Estos funcionarios, pertenecientes al área económica y al servicio municipal de contratación, se encargaron de realizar un análisis documental exhaustivo y de efectuar una primera estimación provisional. Esta estimación fue comunicada a la anterior concesionaria, así como a la entidad avalista y a la cesionaria del precio del contrato, quienes tuvieron la oportunidad de presentar alegaciones.

Las alegaciones presentadas por los interesados fueron objeto de un detallado estudio e informe por parte de la comisión liquidadora. Posteriormente, se emitió una propuesta de acuerdo que fue sometida a la consideración de la Junta de Gobierno Local, la cual ha derivado en el pronunciamiento definitivo que se aprobará en la próxima sesión. Cabe destacar que la tramitación de este procedimiento estuvo suspendida durante un tiempo considerable hasta que el Tribunal Supremo dejó definitivamente asentado el criterio para el cálculo de la partida de personal, uno de los conceptos clave considerados debido a los incumplimientos del contratista.

La concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Santander, Margarita Rojo, ha subrayado la importancia del trabajo llevado a cabo por el Consistorio en este largo y laborioso proceso. Ha resaltado el enfoque "responsable y diligente" del Ayuntamiento para completar todas las etapas necesarias una vez resuelto el contrato. Asimismo, ha destacado que el resultado obtenido es favorable para los intereses del Consistorio, asegurando que se ha hecho justicia en este caso. Margarita Rojo también ha expresado su agradecimiento a los técnicos municipales por su ardua labor en este proceso.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Santander está trabajando actualmente en la preparación del nuevo pliego del contrato de limpieza viaria y recogida de residuos. Se espera que este nuevo pliego salga a licitación a lo largo del verano, una vez que el Comité de Precios del Estado emita el informe preceptivo solicitado, del cual aún se está pendiente. Este paso es crucial para asegurar que la ciudad de Santander cuente con un servicio de limpieza viaria eficiente y en línea con los estándares requeridos por la administración local.

Este complejo proceso, que ha abarcado diversos aspectos administrativos, legales y económicos, refleja el compromiso del Ayuntamiento de Santander con la transparencia y la eficiencia en la gestión de los contratos públicos. La resolución favorable para el Consistorio y la preparación de un nuevo pliego de condiciones son pasos importantes para garantizar que la ciudad mantenga un entorno limpio y adecuado para sus residentes y visitantes.