El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado su intención de presentarse a la reelección como secretario general del PSOE en el próximo Congreso Federal del partido, previsto para noviembre en Sevilla. Durante su intervención en el Comité Federal del PSOE, Sánchez abordó temas clave de la política nacional e internacional, aunque evitó hacer mención directa al pacto del concierto catalán, a pesar de las recientes críticas del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, sobre este tema.

En su discurso, Sánchez adoptó un tono personal al referirse a los ataques hacia sus familiares. El mandatario declaró que el "único pecado" de sus seres queridos es "acompañarle a su lado", refiriéndose a las críticas y acusaciones de corrupción que han recaído sobre su esposa, Begoña Gómez, y su hermano, David Sánchez. Ambos están siendo investigados por presuntos delitos de corrupción. Según el presidente, algunas personas usan el poder para "atacar con mentiras a los familiares a los que uno quiere". Además, afirmó que "ser pareja, hermano y madre de un presidente del Gobierno es más duro que ser el propio presidente, porque no se elige". Ante estos ataques, Sánchez subrayó que, si el precio que deben pagar es la difamación, "apretamos los dientes y tiramos hacia adelante".

El presidente del Gobierno también se refirió a la situación en Venezuela, mencionando al opositor Edmundo González, a quien calificó como "un héroe al que España no va a abandonar". Sin embargo, no empleó ningún calificativo directo sobre el régimen de Nicolás Maduro. En el plano nacional, Sánchez destacó que el PSOE ha logrado vencer a lo que denominó "la internacional ultraderechista", y afirmó que su partido se ha "convertido en un modelo de éxito".

En cuanto a la financiación autonómica, Sánchez evitó mencionar directamente el acuerdo alcanzado con ERC para la financiación en Cataluña, pero afirmó que el verdadero debate no es entre territorios, sino "entre modelos". En ese sentido, criticó al Partido Popular (PP) por hacer "regalos fiscales a los más ricos". Subrayó que el modelo del PSOE es diferente, pues está dispuesto a realizar "nuevas transferencias, competencias, y a reconocer singularidades". Además, propuso que todas las comunidades autónomas que lo deseen puedan recaudar y gestionar más impuestos, lo cual, según él, es coherente con el Estado federal que defiende el PSOE.

Respecto a su candidatura a la reelección, Sánchez destacó su deseo de "compartir ese proyecto con toda la militancia y con la mayoría de los españoles y españolas". Afirmó que su intención es enriquecer el proyecto socialista con nuevas propuestas y mejoras, y concluyó reivindicando "el optimismo".