Rayssa Leal, la joven deportista brasileña de skateboarding, ha vuelto a capturar la atención del mundo no solo por sus habilidades excepcionales, sino por un gesto que ha generado gran controversia. Leal, que a sus 16 años se ha convertido en la atleta más joven en conquistar dos medallas en dos ediciones distintas de las Olimpiadas, utilizó la lengua de signos para citar un versículo del evangelio de San Juan, evadiendo así la prohibición de hacer manifestaciones religiosas en el ámbito olímpico.

Un gesto inesperado en plena competición

El pasado domingo, Rayssa Leal conquistó el bronce en la modalidad de calle del skateboarding en los Juegos Olímpicos de París 2024. Este logro se suma a su medalla de plata obtenida en Tokio 2021, cuando apenas tenía 13 años. Sin embargo, más allá de su hazaña deportiva, Leal ocupó todos los titulares por un gesto inesperado y significativo.

Antes de su actuación, dirigiéndose a las cámaras de televisión, Leal citó en lengua de signos el versículo del evangelio de San Juan: “Jesús es el camino, la verdad y la vida”. Inicialmente, su gesticulación pasó desapercibida, hasta que un conocedor de este lenguaje lo publicó en redes sociales, donde se viralizó rápidamente.

Evadir la carta olímpica con ingenio

Según el artículo 50 de la Carta Olímpica, "no se permitirá ningún tipo de manifestación ni propaganda política, religiosa o racial en ningún lugar, recinto ni área que se considere olímpica". Sin embargo, Leal habría burlado esta prohibición recurriendo a la lengua de signos.

"Cuando era muy joven, soñaba con convertirme en una atleta de skate", dijo Leal el domingo a los periodistas tras hacerse con el bronce. "Y aquí estoy, con una segunda medalla olímpica de los Juegos. Una vez más, gracias a Dios gané una medalla. Estoy muy feliz de estar aquí", confesó.

Rayssa Leal pertenece a la Iglesia Bautista y suele asistir al templo en Imperatriz (Maranhão). Su fe ha sido una parte integral de su vida y su carrera, y ha encontrado una manera creativa de expresarla, incluso dentro de los estrictos límites de la Carta Olímpica.