El senador autonómico y diputado regional, Íñigo Fernández, ha asegurado en rueda de prensa que la pérdida de 600 millones de euros anuales para Cantabria, consecuencia de la financiación singular para Cataluña, supondría “el cierre de la autonomía”. Fernández ha anunciado que el Grupo Popular ha registrado una proposición no de ley (PNL) en el Parlamento de Cantabria para que la región se pronuncie “ya que está en juego nuestro dinero, nuestro futuro y la supervivencia de Cantabria”. Este debate se prevé para el primer pleno de septiembre.

Críticas a la política de financiación

Fernández ha afirmado que la imagen de lo que está sucediendo en España es que “Sánchez, comprando a los catalanes; Zuloaga vendiendo a los cántabros”. Según el senador autonómico, si a Cantabria le reducen los ingresos del Estado en 600 millones de euros al año “hay que cerrar la autonomía”. Señaló que de poco sirve que los diputados del PSOE pidan en el Parlamento de Cantabria más médicos, inversiones sanitarias o obras en carreteras si se les quita el dinero para pagarlo. “¿Con qué dinero lo vamos a pagar? ¿Nos lo van a traer ellos?”, se preguntó Fernández.

Acusaciones de traición

En su opinión, Pablo Zuloaga y Pedro Casares han aplaudido esta operación “de manera desbocada y se han tirado a los pies de Sánchez”, a pesar de que otros líderes socialistas de otras comunidades han mostrado su disconformidad o se han mantenido en silencio. “A Casares solo le importa volver a ser el número uno en la lista al Congreso de los Diputados y a Pablo Zuloaga seguir siendo el secretario general de los socialistas cántabros, pese a su falta de liderazgo y de trabajo. Aunque sea a costa de sacrificar los intereses de Cantabria”, denunció Fernández.

“Se va a sacrificar todo a cambio de que Sánchez siga un solo día más en La Moncloa. No hay otro objetivo que comprar a quien sea, a costa de lo que sea y cueste lo que cueste. Este es el único rumbo que tiene el Gobierno de España”, manifestó.

🔵 @ifedezg : “Sánchez, comprando a los catalanes; Zuloaga vendiendo a los cántabros”

👉 La pérdida de 6⃣0⃣0⃣ millones de euros para #Cantabria, como consecuencia de la financiación singular para Cataluña, supondría “el cierre de la autonomía”

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— ppcantabria (@ppcantabria) August 6, 2024

Llamado a la acción

Fernández destacó que los populares desean que en el Partido Socialista de Cantabria actúen como lo ha hecho el presidente de los socialistas asturianos, Adrián Barbón, quien dijo: “Con el dinero de los asturianos no”.

“Sánchez está descuartizando a plazos este país en cada acuerdo y en cada negociación, comprando los votos de sus socios con nuestro dinero y nuestra dignidad. Cada negociación de Sánchez con uno de sus socios significa el pago de un plazo, el pago de una cuota. Significa un sacrificio más para el conjunto de los españoles”, subrayó Fernández. “Para Cantabria, esta última negociación significaría la pérdida de 600 millones de euros al año, pero a Pablo Zuloaga no le importa. Zuloaga aplaude esta operación, sobre todo si le sirve para seguir al frente del Partido Socialista de Cantabria a pesar de lo cuestionado que está. Sánchez, comprando a los catalanes; Zuloaga, vendiendo a los cántabros”, concluyó.

Crítica al poder de los jóvenes de ERC

Fernández también criticó que un colectivo de “menos de mil chavales entre 14 y 28 años, pertenecientes a las juventudes de Esquerra Republicana de Cataluña” esté decidiendo el futuro de España y cómo se financian todas las comunidades autónomas, incluida Cantabria, sin consultar al resto del país. “¿Se puede permitir que el futuro de un país y el modelo de financiación de las comunidades autónomas lo decida en una votación mil niñatos de Esquerra Republicana de Cataluña? ¿Qué gobierno tenemos en España?”, se preguntó Fernández, criticando la falta de visión y responsabilidad del Gobierno de Sánchez.

En resumen, Fernández y el Partido Popular de Cantabria denuncian la política de financiación del Gobierno central y su impacto negativo en Cantabria, llamando a una respuesta firme y coordinada para defender los intereses regionales.