07.07.2024 |
El tiempo
domingo. 07.07.2024
El tiempo
El Diario de Cantabria
ALERTA El Diario de Cantabria

ETNOGRAFÍA

El regreso a casa de un indiano un siglo después

En un viaje de vuelta al pasado, René Presman descubre sus raíces en Galizano ciento diez años después

René Presman con su esposa y sus hijos Maxi y Santi. / J.L. EZQUERRA
René Presman con su esposa y sus hijos Maxi y Santi. / J.L. EZQUERRA
El regreso a casa de un indiano un siglo después

Una historia que une a dos continentes, donde, René Presman, residente en Pellegrini, La Pampa, Argentina, viaja a Galizano, Cantabria, para redescubrir los orígenes de su familia un siglo después de que su abuelo, Ángel Presmanes, emigrase a Argentina en 1914. Esta aventura de retorno y redescubrimiento comenzó con un libro que cruzó océanos y generaciones. José Luis Ezquerra de Galizano, autor del libro ‘Galizano semblanzas de Cantabria’, ha jugado un papel crucial en este reencuentro.

Su obra, que narra detalladamente las tradiciones, la vida y las costumbres de la zona de Ribamontán al Mar entre 1945 y 1960, fue el catalizador que impulsó a René a buscar sus raíces españolas. La historia comenzó cuando René, explorando recursos en línea, se topó accidentalmente con el libro de Ezquerra. Tras leerlo, se puso en contacto con el autor, desencadenando una serie de descubrimientos que culminarían con su visita a Cantabria este año, marcando exactamente 110 años después de la partida de su abuelo.

Ángel Presmanes, nacido en 1893, fue uno de los muchos jóvenes cántabros que, impulsados por la necesidad y el espíritu aventurero, partieron hacia Argentina en busca de una vida mejor. La partida de Ángel no fue sencilla; se fue solo, a los 16 años, llevando consigo nada más que una boina y sus temores. A su llegada a Buenos Aires, un error administrativo cambió su apellido de Presmanes a Presman, un pequeño cambio que significaría mucho para las generaciones futuras. Durante su vida en Argentina, Ángel trabajó inicialmente cortando leña antes de establecerse como panadero. Se casó con Isabel Herrera y juntos tuvieron seis hijos, cimentando una nueva vida lejos de su tierra natal.,Sin embargo, Ángel mantuvo en secreto los detalles de su pasado, un silencio que persistiría hasta su muerte en 1975. La visita de René a Galizano no solo fue un viaje personal, sino también una conmemoración de la historia de su abuelo y de los muchos emigrantes que dejaron Cantabria en busca de futuros prometedores.

Durante su estancia, René visitó la casa donde nació su abuelo, caminó por las mismas calles y playas, y sintió, quizás por primera vez, un vínculo palpable con su pasado. Este viaje ha cerrado un círculo abierto hace más de un siglo, proporcionando no solo respuestas sino también una paz emocional a René y su familia. Al regresar a Argentina, René llevó consigo no solo memorias y fotografías, sino también un sentido de pertenencia y una conexión reestablecida con sus raíces cántabras.

El reencuentro de René con sus orígenes en Galizano resalta la importancia de la memoria y la historia familiar en la construcción de nuestra identidad. En un mundo cada vez más globalizado, historias como esta subrayan cómo el pasado, por muy distante o silenciado que esté, puede resurgir, brindando nuevas generaciones la oportunidad de abrazar y celebrar su herencia cultural.

El regreso a casa de un indiano un siglo después
Comentarios