Ponferrada (León), 3 ene (EFE).- El entrenador de la SD Ponferradina, Jon Pérez Bolo, quiere "plantar cara y volver a ser un equipo reconocible", en la eliminatoria de dieciseisavos de final de la Copa del Rey que el martes le enfrentará en el estadio El Toralín al Espanyol.

El técnico vasco recalcó que, tanto como cuando fue jugador como ahora en su faceta de entrenador siempre afronta los partidos "saliendo a ganar, pese a ser ante un rival de mucha entidad, que está haciendo muy bien las cosas y sabe lo que hace".

Para la cita ante el conjunto catalán, Bolo esperará a conocer la resolución del comité de competición con respecto a la sanción que les pueda imponer a los tres jugadores que fueron expulsados en el último encuentro de LaLiga SmartBank ante el Real Oviedo (2-0), Edu Espiau, José Manuel Arias Copete y José Naranjo.

"Esperaremos las resoluciones y después, aunque por las circunstancias tenga que ser a última hora, tomaremos las decisiones", aseguró.

Sobre la actuación arbitral del colegiado madrileño David Gálvez Rascón y sus ayudantes, matizó que le gustaría que "en determinadas ocasiones esas personas se metan en los zapatos de otro y comprendan un poco las reacciones", a pesar de reconocer que sus jugadores cometieron "un par de errores muy graves que traerán sus consecuencias y de los que hay que aprender".

En este sentido, añadió que estas actitudes "no pueden repetirse, porque no hacen sentir bien a nuestra afición y no podemos cometer esos errores porque no somos nosotros mismos".

De cara al choque copero, además de esperar las posibles sanciones, también desveló la baja de Erik Morán, al que se le realizará una resonancia magnética para conocer el alcance de su lesión en Oviedo y los seis jugadores que se perdieron la cita en tierras asturianas por el Covid-19 estarán a su disposición aunque valorarán su presencia en el encuentro.EFE

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