El Trofeo Nando Yosu presenció un enfrentamiento táctico entre el Racing de Santander y el Deportivo Alavés, marcando el inicio de la pretemporada para ambos equipos en un duelo que culminó en una emocionante tanda de penaltis a favor de los visitantes. El partido, celebrado en el emblemático estadio El Sardinero, comenzó con el Racing bajo la dirección táctica de José Alberto, quien optó por una formación inusual con tres centrales y dos delanteros debido a las ausencias en la lateral derecha. En contraste, el Alavés, dirigido por Luis García Plaza, mantuvo una alineación más convencional con un 4-2-3-1.

Desde el inicio, el Racing demostró su adaptabilidad táctica, controlando la posesión y buscando desequilibrar la defensa del Alavés. Juanca Arana y Lago Junior llevaron peligro al área rival, obligando a intervenciones destacadas de Owono en la portería visitante. Por su parte, el Alavés buscó aprovechar los espacios en contraataques rápidos, con Xeber Alkain y Kike García como principales amenazas, aunque sin lograr abrir el marcador en los primeros 45 minutos.

El segundo tiempo vio una rotación completa en ambos equipos, con José Alberto ajustando su formación hacia un 4-2-3-1 más convencional, mientras que Luis García Plaza mantuvo la estructura táctica original. Las oportunidades continuaron llegando para ambos lados: Tenaglia estuvo cerca de marcar para el Alavés con un cabezazo que se estrelló en el poste tras un saque de esquina, mientras que el Racing respondió con disparos desde fuera del área por parte de Quicala Bari y Aldasoro que mantuvieron alerta al guardameta Sivera.

Con el empate persistente después de los 90 minutos, el Trofeo Nando Yosu se definió en una emocionante serie de penaltis. El Racing comenzó con buen pie, con Neco Celorio convirtiendo su disparo inicial, pero luego fallaron Aldasoro, Diego Díaz y Manu Hernando. Por su parte, el Alavés mostró nervios de acero con conversiones de Pinichelli, Benavídez y Julen Jon, asegurando así la victoria y el trofeo en un desenlace emocionante para sus seguidores.

El partido no solo sirvió como una prueba vital para ajustes tácticos y evaluación de jugadores antes del inicio de la temporada oficial, sino también como un homenaje al legado de Nando Yosu, figura emblemática en la historia del Racing. Para el Alavés, la victoria en El Sardinero representa un impulso de confianza bajo la dirección de Luis García Plaza, mientras que el Racing extrae lecciones valiosas para su preparación de cara a los desafíos venideros en la temporada 2024/2025.