En un preocupante incidente, agentes del Sector de Tráfico de la Guardia Civil en La Rioja han abierto una investigación a un camionero de 61 años, vecino de Torrelavega, por conducir bajo los efectos del alcohol. El conductor, multirreincidente en delitos contra la seguridad vial, fue detectado con una tasa de alcoholemia que multiplicaba por siete el límite permitido para conductores profesionales.

El suceso se produjo en la AP-68, a la altura del municipio de Agoncillo, cuando la Central Operativa de Servicios de la Guardia Civil recibió una alerta ciudadana. La llamada informaba sobre la conducción errática de un camión de gran tonelaje que circulaba por esta vía.

Gracias a la rápida intervención de los efectivos, el vehículo fue localizado en el kilómetro 140 de la autopista. Los agentes procedieron a asegurar el estacionamiento del camión e identificar al conductor, quien presentaba claros síntomas de una ingesta masiva de alcohol. La prueba de alcoholemia confirmó sus sospechas, arrojando un resultado de 1,11 mg/l de alcohol en aire espirado, muy por encima del máximo de 0,15 mg/l permitido para profesionales.

En paralelo, la Guardia Civil también investiga a dos hombres, de 34 y 53 años, residentes en Calahorra, por un delito similar. Ambos fueron interceptados durante un control de alcoholemia en la LR-134, en el término municipal de Calahorra. Los agentes observaron cómo el conductor de una furgoneta Opel Zafira intentó eludir responsabilidades al intercambiar su asiento con el acompañante justo antes de llegar al control. No obstante, ambos presentaban síntomas evidentes de haber consumido alcohol y, tras realizar la prueba de alcoholemia, los resultados mostraron niveles de 1,08 y 1,28 mg/l, más de cuatro y cinco veces superiores a los límites establecidos.

Los tres implicados, junto con las diligencias correspondientes, han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.