Las fuerzas de seguridad del gobierno de Nicolás Maduro han rodeado la Embajada de Argentina en Caracas, donde se encuentran refugiados varios opositores. Entre ellos se encuentra Pedro Urruchurtu, coordinador internacional del partido opositor Vente Venezuela. Desde su cuenta en X (anteriormente Twitter), este grupo político responsabilizó al presidente Maduro de lo que consideran un "asedio" contra los refugiados. "Siguen llegando patrullas con agentes del régimen a la sede de la Embajada Argentina en Caracas. Responsabilizamos a Nicolás Maduro de este asedio contra nuestros dirigentes asilados", declaró la formación opositora liderada por María Corina Machado.

Urruchurtu denunció la presencia de agentes de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET) de la Policía Nacional Bolivariana y del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN) en los alrededores de la embajada, acompañados por "funcionarios encapuchados y armados", quienes rodean el lugar. Estas acciones han incrementado la preocupación de los refugiados por su seguridad.

Otro de los opositores refugiados, el exdiputado Omar González, ha señalado que las fuerzas de seguridad han interrumpido el suministro eléctrico en la embajada, dejándolos dependientes de una "pequeña planta de emergencia". Junto a ellos también se encuentran Magalli Meda, jefa de campaña para las elecciones presidenciales; Claudia Macero, coordinadora de Comunicaciones de Vente Venezuela; Humberto Villalobos, coordinador electoral del Comando de Campaña del partido, y el exministro y asesor de la Plataforma Unitaria Democrática, Fernando Martínez Mottola.

El grupo decidió buscar refugio en la sede diplomática argentina luego de ser acusados por la Fiscalía venezolana de delitos como conspiración y traición a la patria. Estas acusaciones son parte de un conflicto político que ha escalado desde el pasado mes de julio, cuando los opositores denunciaron que funcionarios de seguridad ya habían intentado tomar la sede diplomática, lo que fue visto como una "grave violación al derecho internacional".

Desde que las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Argentina se rompieron en agosto, Brasil se ha encargado de la custodia de la embajada y de representar los intereses argentinos en Venezuela. Esto ocurrió tras la expulsión de los diplomáticos argentinos de Venezuela, en un contexto de tensiones políticas y diplomáticas.

En este mismo marco de tensiones, el gobierno de Maduro ha pedido el retiro "inmediato" de los representantes diplomáticos de Chile, Costa Rica, Panamá, República Dominicana y Uruguay, como respuesta a lo que consideró declaraciones "injerencistas" respecto a los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio.