El Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, ha dado luz verde a un ambicioso proyecto de rehabilitación en el barrio de las Casas Amarillas y de Piedra en Laredo, una actuación largamente demandada por los vecinos de la zona. El anuncio fue realizado por el consejero Roberto Media durante una reunión con el alcalde de Laredo, Miguel González, y la concejala de Puebla Vieja, Servicios Sociales y Barrios, Rosalina López Visitación. El proyecto, que supondrá una inversión de 800.000 euros, se desarrollará a lo largo de un plazo de ocho meses.

El barrio de las Casas Amarillas y de Piedra, donde residen cerca de un millar de vecinos (lo que representa aproximadamente el 10% de la población de Laredo), ha sido objeto de reclamaciones por parte de sus habitantes durante años debido a la falta de inversiones en mejoras. «Esta actuación ha sido demandada por los vecinos desde hace mucho tiempo, y ahora se da respuesta a esta petición», destacó la concejala López Visitación, al tiempo que el alcalde Miguel González mostró su satisfacción por el compromiso adquirido por el Ejecutivo regional.

Una renovación completa del barrio

El proyecto de rehabilitación redactado por el Ayuntamiento de Laredo abarca una serie de mejoras esenciales para el barrio, comenzando por la renovación integral de la red de abastecimiento de agua. Actualmente, las acometidas y tuberías que abastecen a esta zona se encuentran en un estado de deterioro, por lo que serán sustituidas por otras más modernas y duraderas, de polietileno PEAD de alta densidad. Esta mejora permitirá no solo un suministro más eficiente, sino también una reducción de las pérdidas de agua en la red.

El nuevo sistema de abastecimiento se conectará desde la calle Menéndez Pelayo mediante una tubería de fundición dúctil acerrojada, un material robusto y resistente que garantizará la durabilidad del sistema. El proyecto afecta al perímetro que comprende las calles Gutiérrez Rada, Eguilor y Almirante Bonifaz, zonas claves dentro del barrio. Además, se instalarán dos puntos de desagüe en la red para facilitar el drenaje y evitar posibles inundaciones, y se dispondrán tres bocas de riego y tomas de incendios que mejorarán la seguridad en el área, garantizando una respuesta rápida en caso de incendios.

Mejora del saneamiento

Otro aspecto fundamental del proyecto es la mejora del saneamiento en el barrio. Se incorporará un nuevo colector en la calle Gutiérrez Rada, lo que permitirá una mejor gestión de las aguas residuales. Además, se construirán nuevos pozos de registro e imbornales, y se procederá a la reparación de los tres colectores existentes, que en la actualidad presentan deficiencias que han generado problemas a los vecinos. Estas intervenciones son esenciales para garantizar la salubridad y el bienestar de los habitantes del barrio, evitando problemas relacionados con el mal estado de las infraestructuras de saneamiento y mejorando la calidad de vida en la zona.

Embellecimiento

Además de las mejoras en las infraestructuras de agua y saneamiento, el proyecto contempla una rehabilitación integral del entorno urbano del barrio. Se llevará a cabo una nueva pavimentación en las calles, que mejorará tanto la estética como la seguridad de los peatones. El mobiliario urbano será renovado, sustituyendo los elementos antiguos y deteriorados por otros más modernos y funcionales.

Asimismo, se procederá a la plantación de árboles, lo que no solo embellecerá el barrio, sino que también contribuirá a mejorar la calidad del aire y proporcionar sombra en las calles durante los meses de verano. «El objetivo es crear un entorno más amable y habitable para los vecinos, con espacios que inviten al paseo y al disfrute», subrayó el alcalde Miguel González.

Una de las actuaciones más destacadas del proyecto es la construcción de una rampa de acceso al paseo marítimo, que mejorará la accesibilidad de los residentes del barrio. Esta intervención es especialmente importante para garantizar que todas las personas, independientemente de su movilidad, puedan disfrutar de los espacios públicos de la ciudad. Por último, se procederá al soterramiento de cables en las zonas afectadas, lo que contribuirá a una imagen más limpia y ordenada del barrio, eliminando el impacto visual negativo que generan los cables aéreos.