La presidenta del Gobierno de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha sido la encargada de anunciar esta noticia en una rueda de prensa celebrada en la mañana de hoy, acompañada por el consejero de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Roberto Media, y por representantes de la Asociación Costa Quebrada. Este reconocimiento supone un logro significativo para la región, al posicionarla entre los territorios de mayor relevancia geológica a nivel mundial.

¿Qué la hace especial ?

Ubicada a lo largo del litoral cántabro, la Costa Quebrada se distingue por ser un auténtico catálogo geológico que abarca una variedad impresionante de formaciones en apenas 20 kilómetros. Desde acantilados imponentes y playas de arena dorada hasta cuevas, arcos y sifones, esta área ofrece un paisaje geológico de tal diversidad que, para encontrar algo comparable en Europa, sería necesario recorrer más de cien kilómetros.

El geoparque se extiende desde la península de la Magdalena en Santander hasta la playa de Cuchía en Miengo, abarcando territorios de ocho municipios: Santander, Camargo, Santa Cruz de Bezana, Piélagos, Miengo, Polanco, Suances y Santillana del Mar. Este tramo forma parte de una estructura geológica mayor conocida como el Sinclinal de San Román-Santillana, un gran pliegue resultado del levantamiento de la Cordillera Cantábrica tras la colisión de los continentes europeo y africano.

En esta franja costera, de apenas 20 kilómetros, se encuentra un inventario de más de cincuenta lugares de interés geológico, incluidos en su mayoría en el Global Geosite CB-010 "Dunas de Liencres y Litoral de Costa Quebrada", presente tanto en el inventario mundial de patrimonio geológico como en el nacional. Así, el geoparque no solo ofrece belleza escénica, sino también una ventana al entendimiento del funcionamiento de la Tierra.

Un patrimonio natural y cultural 

El valor geológico de la Costa Quebrada va de la mano con un patrimonio histórico-cultural igualmente notable. El área alberga sitios tan importantes como las cuevas de Altamira y El Pendo, junto al Camino del Norte, todos reconocidos por la UNESCO. Este conjunto de lugares proporciona una perspectiva única de la prehistoria y la historia de Cantabria, destacando su rica diversidad cultural.

Para los visitantes, Costa Quebrada no es solo una muestra de la historia geológica de nuestro planeta; también es un lugar donde disfrutar de actividades como el senderismo, el submarinismo o el surf. Sus playas más conocidas, como La Arnía, Valdearenas, Covachos, Cerrías, Somocuevas, La Virgen del Mar y Cuchía, ofrecen oportunidades inmejorables para el baño y los deportes acuáticos. En los últimos años, además, han sido escenario de eventos deportivos de gran repercusión, como el campeonato internacional de surf de olas gigantes, La Vaca Gigante, y el trail costero.

Un aula natural de conocimiento

La importancia del reconocimiento como Geoparque Mundial por la UNESCO no solo radica en su belleza natural, sino en la posibilidad de ser un espacio educativo excepcional. Este enclave permite estudiar procesos geológicos que han modelado nuestro planeta durante millones de años, como los impactos de la acción marina en las costas y la dinámica de los depósitos arenosos. En este sentido, Costa Quebrada se erige como una de las mejores aulas naturales para comprender la formación de la Tierra y los efectos del cambio global.

Como resaltó la presidenta del Gobierno de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, "este reconocimiento es un orgullo para Cantabria, pero también una responsabilidad. Nos obliga a seguir trabajando en la conservación de este tesoro natural para que las futuras generaciones puedan disfrutar y aprender de él".

Una doble celebración

La distinción de Costa Quebrada como Geoparque Mundial coincide con un momento de auge en la promoción de actividades deportivas y recreativas en la zona. Aparte del ya mencionado campeonato de surf, la región ha visto un aumento en la organización de eventos relacionados con el trail, la bicicleta y el buceo, fomentando un turismo sostenible y saludable.

"La belleza de Costa Quebrada no solo reside en su valor geológico, sino en su capacidad para atraer a personas de todas las edades y perfiles, desde deportistas hasta familias y amantes de la naturaleza", afirmó Roberto Media, consejero de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente. "Este reconocimiento es una invitación a conocer más de cerca nuestra tierra, a respetarla y a aprender de ella".

Un futuro brillante para Costa Quebrada

Con la inclusión en la red de Geoparques Mundiales de la UNESCO, Costa Quebrada no solo gana visibilidad internacional, sino también acceso a recursos y apoyos para continuar con la preservación de su riqueza natural y cultural. Esta designación trae consigo la posibilidad de recibir fondos para la investigación, la educación y el desarrollo sostenible, asegurando que la región continúe siendo un punto de referencia para científicos, turistas y locales.

"El futuro de Costa Quebrada es prometedor", concluyó Sáenz de Buruaga, "y nos emociona ver cómo esta tierra, que es parte fundamental de nuestra identidad, recibe el reconocimiento que tanto merece".

Una invitación abierta a todos

Con su reciente distinción, Costa Quebrada se convierte en el escenario ideal para disfrutar del verano, del invierno, o de cualquier estación del año. Sus playas, acantilados y senderos ofrecen un paisaje que no solo asombra por su majestuosa belleza, sino que invita a sumergirse en la naturaleza, a caminar y a disfrutar de un entorno único.

Ya sea para comprender la historia de la Tierra o para simplemente relajarse y conectar con la naturaleza, Costa Quebrada se postula como un destino de referencia para todos aquellos que buscan algo más que una simple escapada. Como ha demostrado la UNESCO, este pequeño rincón de Cantabria tiene mucho que ofrecer al mundo.