16.09.2024 |
El tiempo
martes. 17.09.2024
El tiempo
El Diario de Cantabria
ALERTA El Diario de Cantabria

FIESTAS CANTABRIA

¿Sabías que Vargas celebra una de las fiestas más antiguas de Cantabria? Conócela

A través de esta fiesta, Vargas, en Cantabria, rinde homenaje no solo a San Sebastián, sino también a su propia historia y a los valores que la han sostenido durante generaciones
La tradicional fiesta de La Perola en una edición anterior. / A.E.
La tradicional fiesta de La Perola en una edición anterior. / A.E.
¿Sabías que Vargas celebra una de las fiestas más antiguas de Cantabria? Conócela

La Fiesta de la Perola, celebrada cada 19 y 20 de enero en Vargas (municipio de Puente Viesgo, Cantabria), es una de las celebraciones más antiguas y queridas de la región, tanto por su significado histórico como por la calidez comunitaria que la rodea. Esta festividad, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional, tiene sus raíces en una conmovedora leyenda local que ha sobrevivido a lo largo de casi dos siglos, simbolizando solidaridad, agradecimiento y devoción a San Sebastián.

La leyenda de San Sebastián y el Milagro de Vargas

La historia cuenta que hace muchos años, cuando la peste asolaba los pueblos de los alrededores, un mendigo llegó a Vargas buscando alimento y refugio. Los vecinos del pueblo, con gran caridad, le ofrecieron comida y alojamiento, sin saber que este pobre hombre era, en realidad, San Sebastián. Agradecido por el buen trato recibido, el santo protegió a Vargas del terrible azote de la peste, evitando que la enfermedad llegara al pueblo.

En agradecimiento por este milagro, los habitantes de Vargas hicieron la promesa de celebrar, cada año, una fiesta en honor a San Sebastián, durante la cual alimentarían a los pobres y mendigos que acudieran al pueblo. Esta tradición se ha mantenido viva a lo largo del tiempo, aunque con algunos cambios, adaptándose a las circunstancias modernas.

La fiesta de la Perola: Cocido para todos

Desde su origen, la Fiesta de la Perola ha consistido en un acto de solidaridad en el que los vecinos de Vargas ofrecían un cocido a los más necesitados. Tras la misa mayor en la iglesia de San Sebastián, el pueblo entero se reunía para compartir su comida. Cada casa preparaba una "perola" (olla) con cocido, y todos los platos se juntaban en una gran olla común, de la que se servía a los pobres bajo los árboles centenarios de la iglesia.

Con el tiempo, la cantidad de mendigos que asistían fue disminuyendo, hasta el punto de que la Junta Vecinal llegó a contratar autobuses para traer a ancianos de asilos de Santander y Torrelavega. Sin embargo, esta práctica se suspendió cuando las religiosas encargadas de los ancianos dejaron de asistir debido al excesivo consumo de vino en ocasiones anteriores.

A pesar de estos altibajos, la fiesta fue recuperada hace algunos años, y hoy en día, el cocido sigue siendo el eje central de la celebración, aunque ahora se prepara en un restaurante local y se reparte en el polideportivo de Vargas, donde se disponen mesas y sillas para todos los asistentes.

La fiesta comienza realmente el 19 de enero, con el tradicional Concejo Vecinal, una reunión a la que, según la tradición, deben asistir todos los vecinos, convocados "a son de campana tañida". Este concejo se celebra en el pórtico de la iglesia o bajo los árboles del pueblo, y en él se discuten los problemas y necesidades de la comunidad, como el uso de los pastos comunales, la recogida de bellotas o la corta de hierba en el "Prau del Toro". Además, se elige al campanero y se presentan las cuentas del pueblo.

Al finalizar el concejo, se reparte entre los asistentes una ración de pan y vino, una tradición que se mantiene hasta hoy, aunque en tiempos de posguerra, cuando el pan era racionado, se distribuía borona (pan de maíz).

Una fiesta que evoluciona con el tiempo

Aunque la esencia de la Fiesta de la Perola sigue siendo la misma, el contexto ha cambiado mucho desde sus orígenes. Hoy en día, el cocido se reparte a todos los asistentes, no solo a los pobres, y la comida se sirve en un entorno más organizado, dentro del pabellón polideportivo de Vargas, lo que permite a los vecinos y visitantes disfrutar del evento en un ambiente cómodo y festivo.

El 12 de mayo de 2004, esta entrañable celebración fue reconocida oficialmente por el Gobierno de Cantabria como Fiesta de Interés Turístico Regional, un reconocimiento a la importancia histórica y cultural de esta tradición.

La Fiesta de la Perola en Vargas es mucho más que una simple conmemoración religiosa. Es un evento que pone en valor el espíritu de solidaridad y la unidad de la comunidad, recordando a los vecinos la importancia de ayudarse mutuamente y de mantener vivas las tradiciones que forjan la identidad de un pueblo. 

¿Sabías que Vargas celebra una de las fiestas más antiguas de Cantabria? Conócela
Comentarios